A muchos de los que transitan eventualmente por la plaza 25 de Mayo les habrá sorprendido, y hasta alarmado, ver el relleno grisáceo que tienen desde hace unos días los huecos de los árboles que la rodean. Pero no se trata de un acto dañino sino, muy por el contrario, es una cura que buscó el municipio junto a la Subsecretaría de Medio Ambiente provincial para las heridas de esas plantas. La mezcla está compuesta de fungicidas, arena, ripio y cemento, entre otras cosas, según dijeron desde la Dirección de Ambiente de Capital.
El tratamiento se hizo en todos los huecos de los costados de los árboles que estaban expuestos al estacionamiento de autos. Estas heridas se fueron haciendo con el tiempo por el humo de los escapes y el roce de los autos que estacionaban alrededor de la plaza. Las partes dañadas fueron estudiadas por la Subsecretaría de Medio Ambiente y rellenadas con la mezcla. "Es algo que se usa en estos casos para darle mayor resistencia a la planta", dijo la directora de Ambiente de Capital, María Elisa Ferrero.
La mezcla fue propuesta desde Medio Ambiente para tratar las heridas de estos árboles dañados ya que, como son muy viejas, no cerrarán naturalmente. El compuesto tiene fungicidas, cemento, ripio, desinfectantes y nutrientes especiales que ayudan a evitar la propagación de insectos y pestes en los árboles. Y es uno de los trabajos que están haciendo en la plaza 25 para dejarla en condiciones nuevamente antes de fin de mes. Ya pintaron algunos bancos, limpiaron la fuente, colocaron plantines y césped y, en esta semana, esperan instalar 50 bancos nuevos y 25 basureros.
El tratamiento de los árboles es parte de un programa municipal para el mantenimiento del arbolado, que tiene como objetivo conocer la situación en la que se encuentran todas las especies arbóreas de las plazas del departamento. Con ese fin, se están realizando en ellos estudios para evaluar cada caso y aportar una solución. Según esa investigación, la mayor parte de los árboles analizados está en mal estado, ya sea por la acción de agentes naturales (como las pestes) o por actos dañinos de personas o vehículos. En algunos casos, las heridas podrán ser tratadas y, en otros, directamente tendrán que reemplazar el ejemplar por otro. Para sustituirlos usarán las especies que tienen disponibles en el vivero municipal, como palos borrachos, paraísos y moras híbridas.
