Pese a que fue un boxeador calificado de "distinto" desde el comienzo de su campaña, de alta técnica, fino y elegante, con un gran dominio del ring, siempre con su estilo clásico y ortodoxo, además de que era una persona muy culta y preparada, como lo demuestran sus estudios de química y farmacia en la Universidad de La Plata -donde había nacido un 25 de octubre de 1905- luego de haber completado el ciclo primario y el secundario en el Colegio Nacional, Julio Mocoroa.

Había sido bautizado por el periodismo especializado como "El Bulldog Platense", acaso también por su mirada desafiante y dominante arriba del cuadrilátero.

Casado con María Cecilia Bottaro tuvo una hija -Hebe- y tres nietas -Graciela, Adriana y María Laura- que no pudo conocer porque murió muy joven, a la edad de 25 años, el 9 de abril de 1931, en la plenitud de su vida y su carrera, víctima de un fatal accidente automovilístico en la ruta entre La Plata y la Capital Federal.

Como profesional Mocoroa realizó 23 combates, con 18 triunfos – 6 por KO – 2 empates y 3 derrotas. Entre 1926 y 1927, el momento de su mayor esplendor, venció a los europeos Doménico Bernasconi y Antonio Ruiz y al chileno Luis Vicentini y empató con Henri Scille.