El plantel de UPCN salió a las 2.30 de la madrugada de ayer de Belo Horizonte (que tiene una hora más que Argentina) y a Ezeiza arribó tras cuatro horas de vuelo. Luego se trasladó a Aeroparque, en donde hubo que esperar hasta pasado el mediodía el vuelo a San Juan. Tantas ganas tenía el equipo de reencontrarse con sus familias, que soportó el tramo final del vuelo a San Juan, que en broma pero con una pizca de descarga por la tensión, el aterrizaje terminó en aplausos.