Una ballena de la especie Minke de unos seis metros de largo apareció ayer de improviso en el dique cuatro de Puerto Madero, en donde está el Yacht Club, en la ciudad de Buenos Aires.
Personal de Prefectura intentaba guiarla para llevarla otra vez hacia aguas abiertas, junto a una gran cantidad de personas que se acercó para observar al cetáceo. La ballena ‘se desorientó y estamos haciendo circular un gomón para guiarla otra vez hacia aguas abiertas que es su hábitat natural y evitar que se lastime‘, dijo un vocero de Prefectura.
Precisó que ‘este es un hecho muy inusual, no sabemos como pudo haber entrado en los diques y llegar hasta la costa, pero se la ve en perfecto estado de salud, no es que está varada o algo parecido. Nuestra tarea es guiarla hacia aguas abiertas‘, reiteró. La ballena ‘da vueltas en derredor de los yates y a veces se choca contra el paredón, por lo que intentamos que no se lastime‘.
La ballena Minke no es muy social. Los especialistas afirman que es muy raro, excepto durante la migración, que se vean más de tres individuos juntos.
La especialista Gabriela Bellazi estimó que la ballena pudo desviarse de su ruta porque está enferma y sugirió que ‘hay dejarla que se vaya sola‘. Pablo Fioramonti, presidente de la Asociación Guías Balleneros de Puerto Pirámide, estimó que ‘probablemente sea un cachorro lactante, que se separó de la manada. Hay que tratar de ayudarlo a que encuentre la salida hacia el mar‘. Diego Taboada, presidente del Instituto de Conservación de Ballenas, advirtió que en aguas dulces ‘se pone en juego su salud y estado corporal‘ de la ballena. Télam y DyN