Al ritmo de redoblantes y tambores, los jóvenes encabezaron la manifestación sin parar de tocar y cantar contra el aborto. Fue durante el desarrollo de la procesión de antorchas en la que unas 4.000 personas de distintas edades y credos participaron para defender la vida. Se realizó ayer, al conmemorarse el Día del Niño por Nacer.
La marcha se realizó por las calles de la ciudad y a paso lento debido a la cantidad de niños, mujeres embarazadas, madres empujando los changuitos y de adultos mayores que participaron. Lo hicieron portando antorchas improvisadas hasta con linternas y carteles realizados en cartulinas, que llenaron de luz y color el trayecto hasta la Legislatura provincial, donde finalizó la marcha.
