Con sus al menos 33 años de vida, la tradicional pizzería Abuelo Yuyi carga sobre sus espaldas con una deuda histórica que hace peligrar su continuidad. Es que la Justicia ordenó el remate del local ubicado en Urquiza y Central, en Capital, para que lo recaudado sea destinado a pagar un saldo negativo de casi 1 millón de pesos que mantiene con la Provincia, que data de hace más de 20 años y forma parte del llamado Residual del Banco San Juan. La subasta será hoy a las 10, pero fuentes judiciales aseguraron que la propietaria y sus abogados están haciendo gestiones a contrarreloj para frenarla. ¿Cómo? Vendiendo el inmueble y apenas unas horas antes, cancelar las obligaciones con el Estado. ¿Por qué se apostaría a esa estrategia a última hora? Sucede que con el remate, el precio que se consigue responde a la mejor oferta, la cual puede ser menor a la de mercado. En cambio, en la venta se acuerda un valor atractivo y conveniente tanto para el comprador como el vendedor.

Por otro lado, en una subasta, cualquiera puede adquirir el comercio e iniciar otra actividad. Bajo esta mirada, estaría en riesgo el trabajo de unos 15 empleados. En una venta, se puede acordar inclusive que el comprador le alquile el salón al vendedor, operación que se estaría barajando en este caso, según deslizaron las fuentes. DIARIO DE CUYO trató de contactar a María Alcira Soria, quien figura como dueña de Abuelo Yuyi, pero no se encontraba en su hogar y en el negocio no contestaron los llamados.

Tanto el comercio como la deuda que lo está poniendo en jaque revisten un carácter histórico. Un empleado que pidió reserva de nombre dijo que la pizzería viene funcionando, al menos, desde 1982 (ver recuadro). Por su parte, la deuda forma parte del llamado Residual del Banco San Juan, esto es, la cartera de créditos que entregó la entidad financiera cuando era estatal y que a pesar de su privatización, quedó en poder de la Provincia. Muchos de esos préstamos se volvieron incobrables porque no contaban con suficientes garantías o prescribieron con el paso del tiempo, lo que significó un perjuicio para las arcas locales. Las fuentes destacaron que en el expediente consta que el antiguo dueño de Abuelo Yuyi, de apellido Morandi, solicitó en 1994 un crédito al Banco San Juan con garantía sobre la hipoteca del inmueble. En 1996 la entidad financiera se privatizó y el préstamo quedó en manos de la Provincia. Por la falta de pago, en 2002 se celebró un convenio que al final no se cumplió y 3 años más tarde, Fiscalía de Estado solicitó la ejecución de la hipoteca. En 2011, el Primer Juzgado Civil ordenó la medida, la cual después de idas y vueltas se llevará a cabo recién hoy.

El remate del local donde funciona Abuelo Yuyi tiene una base de 400 mil pesos, pero no es el único que se pondrá en juego. También forma parte del lote otro inmueble de avenida Central al 1325 Oeste, en Capital. Sin embargo, las fuentes dijeron que si con el primer predio se cubre la deuda con la Provincia, no será necesaria la subasta del restante. De todas formas, hoy se sabrá si la propietaria concreta la venta del local y puede depositar los fondos para frenar el remate. En cualquiera de los casos, el Estado recuperará una deuda que data de 21 años.