Siempre hay buenas noticias. Manteniendo el ritmo de crecimiento de los últimos seis años, SolFrut Aceites -una de las principales productoras de aceite de oliva virgen extra del país- aumentó su facturación en un 55%, en relación al año anterior y lidera la producción y comercialización de aceite de oliva virgen extra: Oliovita es su marca propia. Durante el 2014, facturó $60,5 millones de pesos, de los cuales $51 millones fueron en el mercado: $17, 6 millones en su propia marca Oliovita, $17,4 millones en marcas blancas y $16 millones en venta a granel; y $9,5 millones en exportaciones. Dentro de la venta internacional, $4,2 millones se destinaron a granel, $4,1 millones a marcas blancas y $1,1 millón a Oliovita.
Guillermo Kemp, gerente comercial de la empresa, indicó: "Estamos convencidos en el potencial exportador de Argentina en el mercado mundial de los aceites de oliva, principalmente en la categoría virgen extra. Allí tenemos muchas ventajas como país y contamos con un gran espacio para el crecimiento: casi el 90% del aceite que producimos puede ser virgen extra. Se trata de un alimento muy saludable y cada vez son más los mercados del mundo que lo requieren".
Para desarrollar su proyecto olivícola, la productora posee más de 4.600 hectáreas en las mejores zonas olivícolas precordilleranas: 3.600 en la provincia de San Juan y 1.000 en La Rioja. En total, 1.400 hectáreas están plantadas con los mejores olivares del mundo, manteniendo un ritmo de crecimiento constante de alrededor de 200 ha por año en las 2 regiones.
La evolución de las exportaciones de aceite de oliva en las últimas cuatro campañas, "se da en relación directa con la producción. Argentina puede exportar todo lo que produce y más, ya que el consumo interno es muy bajo. Por eso, años como el 2011 y 2013 fueron años de mucha exportación -20.000 toneladas aproximadamente- y seguramente el 2015 también lo sea. En cambio, en el 2012 y 2014, las exportaciones fueron muy bajas".
Respecto de los principales destinos comerciales señaló: "El principal mercado es Estados Unidos. Respecto a los precios, al tener escasa historia olivícola y poca comunicación, en el exterior dependemos de los países formadores de precios (la Comunidad Europea). Ellos dictan el pulso del mercado y, a pesar de que en muchos casos Argentina cuenta con aceites de superior calidad que los europeos, nos vemos en la situación de competir por precio".
"Nuestra meta como país es posicionarnos como un país productor de aceite de oliva extra virgen, ya que en España por ejemplo, más del 50% de lo que producen no es extra virgen", afiirmó.
Sobre el impacto del proceso inflacionario argentino en el comercio exterior comentó, "el dólar chato es muy perjudicial para este tipo de productos de economías regionales. Tenemos aumento de costos internos, inflación creciente y dólar chato, compitiendo con países que reciben subsidios a la producción cuando en Argentina se pagan retenciones para exportar".
Consultado sobre su visión tienen del comportamiento comercial, "en el mediano y largo plazo es positiva ya que el consumo mundial de aceite de oliva tiende a crecer. El mercado argentino tiene mucho potencial, es por eso que debemos trabajar en educación respecto a las bondades y atributos del aceite de oliva", afirmó finalmente Guillermo Kemp.
La Rioja
Desde la Cámara Olivícola de esta provincia, su gerente, Diego Andrada, comentó a Suplemento Verde de DIARIO DE CUYO que "nuestra provincia posee alrededor de 25 mil hectáreas, de las cuales el 60% se encuentran representadas por nuestra institución. Históricamente, el mayor porcentaje siempre fue hacia la conserva, pero en la actualidad las proporciones tienden a equilibrarse, sea por cuestiones climatológicas que aceleran la maduración de fruta, la falta de cosecheros, mejores precios internacionales del aceite, entre otros".
"El mercado externo es el destino comercial de la mayor proporción de la producción, tanto de aceite como de conserva, siendo países como Brasil y EEUU los principales compradores de nuestros productos", indicó, agregando: "El mercado interno representa una participación reducida, dado que en el caso del aceite de oliva, el consumo nacional es muy bajo, comparado el de países como Brasil y EEUU, ni hablar de España. Por cada tonelada consumida en nuestro país, en Brasil se consumen 12 toneladas, en EEUU 49 toneladas y España 97 toneladas".
"Estimaciones iniciales de la cosecha 2015, hablaban de 90 mil toneladas de fruta para este año, pero en la actualidad dichos valores se encuentran cercanos a las 100 mil toneladas. Con la baja producción del 2014, no mayor a las 40 mil toneladas de fruta, todas las existencias de aceite de oliva fueron comercializadas, por lo que la campaña industrial del aceite de oliva encuentra a las empresas productoras socias sin stock, estimándose que la producción de aceite de oliva será de entre 8-9 mil toneladas.
Luego de una campaña pésima en el 2014, las perspectivas de la actual cosecha son mejores, dada la reducción de la oferta de aceite oliva español, que impulsó una mejora en los precios internacionales del producto, en 3500 euros la tonelada actualmente. Las devaluaciones del Euro y del Real a principio de año, hacen que las proyecciones comerciales sean optimistas pero moderadas", afirmó finalmente Andrada.
