Las fotos de Michael Jackson muerto en una cama de hospital, contrapuestas con imágenes del cantante de “Thriller” ensayando un día antes de su deceso, y la voz de Jackson aturdido, supuestamente bajo los efectos de alguna sustancia dieron inicio ayer a una emotiva sesión del juicio contra su médico, Conrad Murray, acusado de homicidio involuntario.
La sesión arrancó en Los Ángeles con el alegato del fiscal, David Walgren, quien describió al doctor como un profesional avaricioso y negligente cuyos “actos” acabaron con la vida del “Rey del Pop”, y como muestra de esto presentó las fotos que consideró pruebas concluyentes de la culpabilidad. La diferencia entre ambas muestra que “entre un día y otro (el 24 y el 25) obraron las acciones” dijo. Por su parte, el abogado de la defensa, dio vuelta ese argumento e insistió en que el propio Jackson, se autoadministró los medicamentos que lo mataron. En este marco, Walgren aseguró que Murray, a pesar de ver el estado de deterioro de Jackson, continuó dándole el medicamento y cometió una “negligencia” equivalente a un homicidio, sin embargo el acusado se ha declarado inocente y en caso de ser considerado culpable enfrentaría a una pena de hasta 4 años de cárcel.
Fuente: Reuters y Efe
