Un cruce peligroso, muy congestionado y la necesidad de ordenar el tránsito para evitar choques fueron los factores que el municipio de Rivadavia tuvo en cuenta para hacer una rotonda inédita en la provincia. Es una que pintaron sobre el pavimento y que rodearon con reductores de velocidad.
La hicieron sobre calle Reconquista frente al barrio Cooperarq 5, a modo de prueba piloto, aunque las autoridades municipales no descartaron la posibilidad de hacer otra en otro sector del departamento.
Esta posibilidad surgió después de corroborar que esta obra dio hasta ahora buenos resultados porque los conductores de autos, motos y bicicleta la respetan.
La rotonda está al ras del suelo, pero igualmente se ve desde lejos por lo llamativo de su estructura. Es un círculo perfecto, de unos 4 metros de diámetro, cuyo borde está pintado de amarillo y en el centro muestra una especie de tablero de ajedrez gris y blanco que se resaltó con pintura fluorescente de la que se utiliza para pintar las sendas peatonales. Lo único que sobresale a unos 10 centímetros del suelo son los reductores de velocidad amarillos que lo rodean.
