Un día después que se anunciara en Mendoza que Marcelo Tinelli ha invertido en la compra de 140 hectáreas en Agrelo, Luján, para hacer un emprendimiento vitivinícola y turístico, el domingo se informó que esa operación, estaría implicada en los casos de corrupción denunciados contra el titular de Irrigación -el organismo de control del agua escasa- al que acaba de suspendérselo en sus funciones y sometido a Jury de investigación.

Ocurre que Tinelli es inversor de Santa María de los Andes, un emprendimiento inmobiliario que obtuvo el permiso para hacer dos perforaciones nuevas en plena crisis hídrica y en una zona prohibida. Justo el tema que ha conmocionado la política hídrica de la provincia en los últimos meses y que complica al PJ, a la nueva fórmula de gobierno y a un sector de la Rosada muy allegado a la presidenta. La inversión de Tinelli en Mendoza, en sociedad con el dueño de Casino Victoria, Daniel Mautone estaría envuelta en este escándalo porque habría obtenido dos permisos de perforaciones, y que ahora se investiga, estaría involucrado en la lista de pozos de agua obtenidos por vía no santa. Los negocios inmobiliarios que pretenden el agua, además de algún tipo de producción agrícola, incluyen canchas de golf, piscinas, lagunas artificiales para deportes acuáticos, entre otras. Todas estas propuestas incluyen el uso de agua en grandes cantidades.