Sí, Tevez es un superhéroe, además, porque después de dos horas del triunfo del domingo sobre Banfield y a pura tensión, se bañó rápido y se fue a dar una entrevista por la noche al programa La Cornisa, en América TV, un sitio al que iba a ir hace siete días pero que suspendió tras fracturar a Ezequiel Ham en La Paternal. El domingo por la noche habló de ese episodio: “Estaba mal. No me importa que me digan mala leche. Yo me lo paso por… Lo único que quiero es que Ezequiel se recupere lo antes posible. Siempre voy a trabar abriendo el pie y creí que él venía a pegarme un pelotazo. Fue una jugada desafortunada. Nunca me pasó y sólo quiero estar al lado del chico en su recuperación. Yo estaba amonestado y el referí me dijo que cualquier jugada que hiciera, me echaba. Por eso me fui a un costado. En la jugada, nunca me di cuenta de la lesión porque me hubiese acercado. Era para roja, lo sé, pero no me expulsó”, contó con sinceridad el “Apache”.
La relación de Tevez con el hincha de Boca vivió un domingo especial. “¡Que de la mano, de Carlos Tevez, todos la vuelta vamos a dar!”, cantaron antes, durante y después del partido en la Bombonera. Y él devolvió la ovación tocándose el corazón con la mano. Festejó su gol, el tercero, con Calleri porque “Jony es un jugador que te hace las cosas fáciles. Nos entendemos; él hace el trabajo sucio. Hoy (por el domingo) me la dio para que la empuje abajo del arco”.
Luego sí, con la alegría por otra victoria, manifestó: “Estoy contento porque el equipo dio una muestra de carácter. Y fue un partido muy difícil, eh… A este grupo le costaron los partidos importantes. Por eso festejamos haberlo sacado adelante. San Lorenzo había perdido puntos y nosotros teníamos la obligación de ganar. Todavía falta lo más difícil, que es cerrar el campeonato. Tenemos una buena ventaja, pero son muy importantes los cuatro partidos que faltan”. No esquiva las responsabilidades el Apache. Jugó con cuatro amarillas sobre el lomo y, cuando todos creían que se haría amonestar para descansar ante Crucero del Norte, él no quiere saber nada. “A ningún jugador le gusta quedarse afuera de un partido. Me tengo que cuidar y listo”, afirmó. Y luego pensó en el futuro inmediato de su equipo: “Tenemos chances de ganar los dos torneos, depende de nosotros y de eso nos tenemos que agarrar. El año que viene debemos estar preparados para jugar la Copa Libertadores, pero ahora se nos vienen los partidos decisivos y tenemos que sacarlos adelante”.
Para el final, dejó su sentencia sobre el porqué de su retorno anticipado: “Yo me dormía pensando en volver a la Bombonera. Veía que Boca no arrancaba y quise venir a dar una mano al club que tanto amo”.
