Ayer Santa Rosa convocó a más de 4.000 fieles (según la Policía) en 25 de Mayo. La mayoría concurrió en familia para demostrar su fe en la Patrona, primero en la procesión que se realizó por las calles de la villa cabecera, y después durante la Santa Misa que celebró Monseñor Alfonso Delgado. Todo ocurrió durante el cierre de las Fiestas Patronales.

Sentadas en el suelo o apretujadas hasta en los bancos de la plaza, las personas ocuparon su lugar para escuchar la palabra de Dios. Y siguieron atentamente el sermón del obispo referido a que se debe celebrar la vida y darle gracias al Señor por estar presente en cada una de las actividades que se realizan a diario, recomendación que dirigió especialmente a los niños que tomaron la primera comunión.

Terminada la celebración de la palabra la gente no regresó a sus hogares. Se quedó para recorrer la plaza de Santa Rosa que se había convertido en una verdadera feria de artesanías, ropa y productos regionales.