Antes de las redes sociales, el chat, las tribus urbanas y otras variantes típicas para su edad, eligió el camino de las artesanías. Y se ha convertido en la sensación del momento. Sorprende a vecinos y a turistas por el trabajo que realiza y porque, con apenas 13 años, se gana la vida vendiendo sus creaciones para poder estudiar y ayudar con los gastos cotidianos de su familia.
Se trata de Victoria Gatica, quien teje al telar y se ha transformado en la artesana más joven de la Feria de Artesanos de Médano de Oro. Una pequeña que sueña con llegar a tener su propia empresa de tejidos artesanales.
En su habitación no hay lugar para adornos. Sólo para sus herramientas de trabajo. Por todos lados hay bolsas con lana, prendas terminadas y telares de diferentes formas y tamaño. También revistas, aquellas que compró para aprender a tejer en forma autodidacta.
‘Desde chiquita mi mamá me enseñó a tejer al crochet, pero un día vi un chal hermoso, tejido al telar, y entonces me propuse aprender esta otra técnica -contó la pequeña-. Ahorré la plata que me daban para la merienda y me compré algunas revistas, y en menos de un año aprendí a tejer al telar‘.
Victoria se define como una artesana innovadora que no se conforma con tejer sólo mantas o chales. Dijo que también le gusta hacer prendas de moda en el telar, como toreritas, chalecos, tapados y polleras, combinando lanas de diferentes colores y texturas. Tanto para mujeres como para niñas.
‘Mi papá me hizo telares triangulares y cuadrados de tamaño pequeño para poder hacer prendas para las nenas y para mí que soy flaquita -explicó la chica-. Pero mi telar preferido es uno con peine. Es el que el año pasado mis papás me dieron de regalo para mi cumpleaños. Lo compraron con los ahorros que tenían guardados‘.
Desde que comenzó el receso escolar, Victoria teje durante todo el día. Quiere aprovechar este tiempo libre para aumentar su oferta y las posibilidades de ventas los fines de semana. Dijo que su meta es tener su propia empresa de tejido artesanal a la que ya le ha elegido el nombre: El Hornero, porque según la pequeña, este pájaro es un ejemplo de trabajo y perseverancia.
