San Juan, 3 de abril.- Atentas a cada detalle, el tiempo de cocción, el punto justo del chocolate y las formas precisas para obtener un huevo de pascuas ideal, tal como se puede comprar en cualquier comercio grande pero con la diferencia que estos son hechos “como en casa”.
Se trata de las alumnas de la Escuela Técnica de Capacitación Laboral Gaviorno del departamento de Ullum que cada año, para esta época y para otras también, cocinan distinto tipos de productos para vender y de esa manera obtener un beneficio económico y aprender el negocio.
En este caso, las 25 chicas de los tres niveles cocinaron, cada una, más de 100 huevos de pascua a lo que hay que sumarle una buena cantidad de bombones y de otros productos.
Los precios son insuperables
Las alumnas preparan hasta cinco huevos de distinto tamaño: los más chicos cuentas $10, le sigue uno de $15, otro de $25, uno más de $30 (equivalente a uno de $50 que se puede encontrar en el marcado tradicional), mientras que un gran conejo de chocolate puro tiene un precio de $45 siendo el más caro de la producción.
Cómo los venden
El procedimiento de comercialización es interesante ya que cada una de las alumnas es la encargada, en las semanas previas a Semana Santa, de levantar los pedidos en cada uno de los puntos de venta y de esa manera ya tener, de antemano, la cantidad de productos a preparar. Algunas llegan a preparas hasta 250 unidades, contado desde los huevos, pasando por los conejos hasta llegar a los bombones.
Historia
La Escuela Técnica de Capacitación Laboral Gaviorno tiene 51 años de historia y todos los años realiza, tanto para Navidad como para Semana Santa este tipo de preparación. En la primera hacen pan dulce y otros productos. Pero también durante el año hacen fideos, ñoquis, pollo y comidas para celíacos entre otras cosas, según explicó María Hortensia Aballay, una de las titulares de la institución.
Una profe comprometida
La encargada de llevar y organizar todo dentro del curso es la profesora Valeria Gómez que tiene además una historia particular porque vive en Caucete y tarda dos horas todos los días para ir a dar clases a Ullum. Pero no solo eso, ya que Valeria es la encargada de hacer las compras de los insumos necesarios para que sus alumnas puedan cocinar. “En esta oportunidad he comprado 30 kilos de chocolate y cada huevo pesa, aproximadamente, unos 100 gramos. De esta manera las chicas pueden aprender a cocinar todo tipo de cosas y la importancia de conocer cuánto les puede constar producirlas y a cuanto lo pueden vender y de esa manera ganar algunos pesos para ellas” dijo Valeria Gómez a DIARIO DE CUYO.