Muchos grandes campeones no supieron sobrellevar el retiro y sucumbieron. Sugar Ray Leonard recurrió a las drogas y alcohol cuando tuvo que retirarse por primera tras una lesión en el ojo en el 1986, pero logró sobreponerse. El puertorriqueño Edwin “Chapo” Rosario fue uno de los púgiles más brillantes de ese país, pero su carrera fue tronchada por problemas con drogas y alcohol. Murió en el 1997, a los 34 años. El ex campeón Aaron Pryor venció su adicción a cocaína y hoy día ofrece charlas de motivación. Otro que hizo rehabilitación fue Mike Tyson, quien hoy baila en el programa de Marcelo Tinelli.
