No necesitaba sufrirlo tanto. Era suyo y mereció ganarlo antes, pero Unión se tomó su tiempo. Así, el Azul se adueñó del clásico contra Huracán Las Heras al que venció por 3-1 y por ahora es el líder de la Zona 7 del torneo. Sorprendió de entrada Unión y luego de algunos sobresaltos, volvió a reaccionar para poner todo en orden. El efecto sorpresa fue propiedad de Unión para empezar a ganar en el Malvinas Argentinas y es que a los 7’ abrió la cuenta con una aparición de Daniel Gómez en plena área de Huracán tras un doble cabezazo sanjuanino. Ese golpe fue mortal y le puso a Unión todo a su favor. Es que Huracán se desesperó y el Azul pudo haberlo definido en dos jugadas netas de gol con Silvio Molina y luego con Cristian Pérez. Aunque en el tramo final de ese primer tiempo, hubo reacción en el local, Unión no pasó grandes sobresaltos excepto ese cabezazo desviado de Carrizo casi en el final.
En el complemento, el partido no cambió demasiado: Unión siguió siendo más claro y Huracán no le encontró la vuelta. Pero Unión le perdonó la vida varias veces y no lo resolvió antes. Eso le terminaría costando caro porque a los 19’, Guerra puso el 1-1, castigando la falta de efectividad de Unión. Entonces el Azul perdió confianza y empezó a sufrir. Se complicaba, pero a los 28’ Alaniz le cometió penal a Sosa y Unión ahí se volvió a adueñar del partido. Silvio Molina lo cambió por gol y puso el 2-1, merecido para Unión, que desde ese instante se dedicó a cuidar el resultado hasta que en el descuento, el Chori Sosa sacó a relucir toda su categorías para poner el 3-1 y sentenciar el partido que tanto quería ganar y aunque Huracán tuvo la chance de descontar, Olivera tapó el penal que le dieron en el final.
