Lograr una mayor eficiencia en el uso del agua agrícola es el más grande desafío que tenemos hoy los sanjuaninos y en este sentido es tan responsable del tema el que distribuye como el que usa el agua y así quedó en claro la conferencia del ingeniero del ingeniero Fernando González Aubone durante el segundo módulo de la Cátedra Libre del Agua desarrollada recientemente por el INTA San Juan junto a la Facultad de ingeniería.
Es que cundo hay sequía extremas como la actual evitar un 40% de pérdida de agua por rotura de un canal o por usar un mejor método de riego en el parral tiene un gran significado económico y así quedó claro en los debates muy bien moderados por el ingeniero Omar Miranda, director del INTA local.
Por su parte el inspector general de riego Ricardo Giménez, explicó mantener el sistema de distribución de agua para uso agrícola en la provincia de San Juan, es una labor titánica, cada vez con mayores problemáticas estructurales y coyunturales. Se trata de la red más extensa, con 2.015 kilómetros de canales y 1.400 de drenes y desagües.
Entre los problemas estructurales, se encuentran, la falta de inversión y presupuesto que durante décadas debió soportar esta repartición; así como la reducción y el envejecimiento del personal consecuente. Cabe destacar acá la inversión de unos U$S21 millones del Prosap junto a la provincia para reparar el Canal del Norte, así como los U$S22 millones que se invierten actualmente en el Céspedes-Sarmiento, así como la red secundarias de cinco departamentos del Valle de Tulum que demandará unos 19 millones de pesos.
Giménez enumeró en 2.400 las compuertas aforadas para entregar el derecho de riego a unos 35.102 usuarios existentes al 30 de noviembre pasado. Estos usuarios dividen el uso del agua en unas 178.766 hectáreas de uso agrícola, 7.421 de uso hidroenergético, 4.951 hectáreas de para consumo humano; mientras que para uso minero, sólo son unas 1.732 hectáreas (1%) y 850 de ellas aún sin uso y correspondiente a la minera El Pachón.
Con sólo 236 personas abocadas a la distribución, esta labor se vuelve cada vez más problemática considerando los daños cotidianos ocasionados por los "bañistas", rompiendo cadenas y candados, y destrozando compuertas e incluso compartos.
Los problemas
Entre los problemas coyunturales o de problemática externa a la distribución del agua, Ricardo Giménez enumeró los siguientes:
1- La basura: personas inadaptadas socialmente y de todas las condiciones económicas, consideran a la red de riego como un sistema para solucionar su problema residuos, causando incluso daños irreparables.
2- Crecidas: en muchos lugares de la provincia, en función de su geografía montañosa, la solución de los daños producidos por lluvias aluvionales absorbe gran parte de los recursos anuales de la repartición.
3- Robo de agua: se trata de una problemática creciente donde los protagonistas no solamente son los regantes, sino cada vez más instituciones públicas y privadas que literalmente "asaltan" la red de riegos.
Giménez ponderó una vez más el hecho de la distribución del recurso hídrico atada al mantenimiento de la red y la normativa respecto de la distribución del agua en la provincia de San Juan, es decir, la Ley 4.392, que fija entre otros términos, los turnos, el control y la fiscalización del sistema.
En este sentido destacó también la Ley Madre de Hidráulica, la 886 de Creación del Departamento de Hidráulica, atando la distribución al mantenimiento del sistema y en este contexto la Junta de Riego fija cada año el presupuesto anual y también la prorrata entre los usuarios para mantener los servicios.
El presupuesto elaborado por las comisiones y juntas departamentales de regantes para el mantenimiento del sistema de riego, drenes y desagües para el año 2013 es de $43.870.000.
No en vano Sarmiento decía: "el agua es para San Juan como la sangre para el ser humano". Entonces simplemente, no resta cuidarla.