El próximo domingo 19 de abril debe concluir formalmente la cosecha vitivinícola en todo el país, según confirmó ayer el presidente del INV, Guillermo García. El funcionario reiteró que “la baja del volumen es impresionante y tendrá finalmente una caída de 600 ó 700 millones de kilos respecto a una cosecha normal como la de 2007”. Por otro lado, y si bien no fue confirmado oficialmente por el organismo nacional, los técnicos ya están previendo una caída en los despachos al consumo para el mes de febrero de casi el 14% -la demanda interna cayó en enero un 6,30% con respecto al mismo mes de 2008-, marcando así una tendencia negativa consecutiva que se viene registrando desde octubre del año pasado. Esta semana en curso y la próxima -según adelantó el titular del INV- serán clave en la cosecha en Mendoza, tanto en la definición del volumen total para la región, como para precisar el porcentaje de mosto que se habrá elaborado en la región. Cabe acotar que en la cosecha 2007, el total del país y con una superficie cultivada y en producción que poco ha cambiado, sumó poco más de 3.000 millones de kilos (de ellos 2.090 millones correspondieron a Mendoza y 886 millones se recogieron en San Juan). De allí en más los números evidencian baja constante: 2.831 millones en 2008 y para esta vendimia el número global difícilmente supere los 2.400 millones de kilos. San Juan ya prácticamente culminó su cosecha, mientras que en Mendoza aún se evidencia actividad cosechera en el Este -reino de las criollas mosteras y los blancos básicos- y en el Valle de Uco. Desde el INV se reiteraron ayer los factores que han incidido en la baja notable después de los pronósticos de diciembre y febrero: Accidentes climáticos, lluvias, vientos y granizo, semanas de intensos calores inusuales y luego enfermedades criptogámicas. Todas ellas, se insiste, terminaron por jugar fuerte hacia la baja del peso del racimo, por lo que llaman los especialistas “la ola de calor”. Ya es un hecho, además, que no sólo habrá baja del volumen total de cosecha, sino también en la elaboración final de mostos; los registros provisorios del Instituto adelantan no más del 12% en Mendoza y 42% en San Juan, lo que da un promedio regional que rondará el 20 ó 21% (ambos gobiernos fijaron un 20 % como piso). El presidente del INV dijo que “a raíz de las características de esta cosecha, de baja en el volumen y aumento del grado promedio, sobre todo en Mendoza, los equipos de inspección trabajan celosamente para evitar alteraciones”. Esto, en virtud de que hace 10 días un equipo del INV detectó alteraciones en una bodega del Este mendocino.
