Guillermo Vilas fue homenajeado ayer con una estatua en el Club Náutico Mar del Plata, donde comenzó a forjar su exitosa carrera.
Ante una gran concurrencia de público, y con motivo de cumplirse 35 años de su primera consagración en un Grand Slam (Roland Garros 1977), Vilas fue homenajeado en el club en el que dio sus primeros pasos en el tenis, con una escultura de hierro a escala real, con 1.80 de alto y más de cien kilogramos.
