El azul y amarillo predominan en el Club Villa Ibañez. La institución queda en el ingreso mismo al departamento Ullum. Allí, la Escuelita de Fútbol comenzó a funcionar nuevamente hace unos años gracias a la iniciativa de Gabriel Molina, quien puso manos a la obra para volver hacer funcionar esa ‘fábrica de campeones’. Es que de allí surgieron grandes íconos del fútbol sanjuanino que hasta hoy siguen vigentes como Alfredo ‘Luto’ Molina, y Mariano ‘Petinato’ Nuñez. ‘Ellos dos son nuestro orgullo pero hubo otros grandes jugadores que se los llevaron a la ciudad pero no pudieron seguir con ese ritmo’, cuenta con algo de nostalgia Gabriel Molina, justamente hermano del ‘Luto’ y presidente de la Escuelita.

El fin es uno solo: brindarles a los pequeños un deporte como forma de contención practicando fútbol y divirtiéndose. Según cuentan los padres de los chicos, en Ullum no existen hoy por hoy escuelitas de deporte para varones. ‘Hubo karate, ciclismo, vóley, pero ninguno tuvo continuidad. Es una lástima porque acá los chicos no tienen mucho para hacer’, sostuvo otra mamá. Y por lo bajo, contaron que la droga creció en este último tiempo atacando a los adolescentes del departamento y el deporte resulta una eficiente arma para combatir esos flagelos.

La escuelita hoy por hoy cuenta con poco más de 60 chicos que van desde los 4 a 17 años. Los profes cuentan el enorme sacrificio que hacen cada vez que tienen que participar en algún torneo de la ciudad. Es que a muchos de los chiquitos se les complica poder participar porque sus familias son de escasos recursos y pocas veces pueden pagar lo que exige el viaje hasta la ciudad o al lugar donde se realicen los torneos. Por eso mismo no participan en el campeonato de la LIFI, porque les resultaría muy difícil conseguir los fondos que demanda el traslado a la ciudad y el pago de los árbitros.

Aunque con enorme orgullo cuentan con un subcampeonato logrado en Chile. Y así, participaron también en torneos de Córdoba y Mendoza, siempre obteniendo buenos resultados pero sacando otro premio aún mayor: consiguiendo grandes valores. ‘Somos el club que más campeonatos logró aquí en Ullum’, sostienen con orgullo los profes. Y sí, basta con ver la sede del club minada de trofeos conseguidos por las anteriores generaciones y muchos otros logrados recientemente por estos chiquitos. Esos trofeos son una muestra que estos pequeños son el motor que hoy mueve a todos en Villa Ibañez.