Recién el próximo miércoles, los viñateros podrán solicitar el subsidio del Gobierno para que puedan vender el kilo de uva para mosto a 1,60 pesos. El ministro de Producción, Marcelo Alós, explicó que la operatoria se fijó para esa fecha porque es cuando las bodegas comienzan a moler en mayor cantidad, además de que están terminado los últimos detalles administrativos para que el pago llegue antes de los 20 días de presentada toda la documentación. El interesado podrá recibir hasta 75 mil pesos de contado por la entrega, como máximo, de 100 mil kilos de uvas. Pese a que reclamaban medidas para poder levantar la cosecha y que ésta sea rentable, desde la Federación y la Asociación de Viñateros independientes habían considerado “bajo” al precio de referencia, ya que “no alcanza para cubrir los costos productivos”. Así, ayer ambas entidades concretaron una extensa movilización por puntos neurálgicos de la ciudad (ver foto).
La región atraviesa una profunda crisis vitivinícola debido al sobrestock de 300 millones de litros de vino, que han empujado los precios hacia el piso. A eso se le suma, la reducción del consumo del mercado interno y la caída de las exportaciones. En ese contexto, la gestión giojista acordó con las principales empresas mosteras (Fecovita, Peñaflor, Viñas Argentinas, Mosto Mat) un valor de 1,60 pesos para el kilo de uva destinado al jugo concentrado. El Gobierno se hará cargo de 75 centavos para sostener el precio, mientras que los industriales abonarán los 85 restantes. Para acceder al subsidio, el productor, primero, debe solicitarlo desde el miércoles 18 en la Dirección de Asuntos Vitivinícolas, ubicada en el cuarto piso, núcleo 5 del Centro Cívico, de 7.30 a 14. El ministro Alós y el director de la repartición, Jorge Escobar, señalaron que deben presentar la tarjeta del viñatero, el DNI y el registro en la Dirección General de Rentas de la provincia y el de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), para obtener el CUIT. Escobar resaltó que no es un impedimento para conseguir el aporte oficial el hecho de que tengan deudas en ambos organismos o en el banco.
Luego de que el viñatero deje la uva en la bodega, debe llevar a la repartición vitivinícola el Certificado de Ingreso de Uva (CIU) que le entregan en la empresa, en el que conste que el producto fue destinado a mosto. “No vamos a pedir nada distinto de lo que solicita una bodega”, resaltó Alós. Una vez presentado el CIU, se dispara el proceso de pago. El titular de la cartera productiva manifestó que este procedimiento ya se ha hecho en ocasiones anteriores y que la entrega de los fondos ha sido “en un plazo de 20 días”. En esta oportunidad, remarcó que el objetivo es “reducir ese tiempo lo máximo posible”, por lo que hoy mantendrán reuniones con los funcionarios del área contable para agilizar el trámite administrativo, “sin perder de vista los organismos y pasos de control, porque se trata de dinero público”, afirmó Alós.
El objetivo del Gobierno es dotar de liquidez principalmente a los pequeños y medianos productores. Por eso, el pago será de contado y será transferido a la cuenta bancaria del viñatero en el plazo que se fije definitivamente. En el caso de los mosteros, destinarán sus fondos “a partir de los 30 días de que el Gobierno pague y será hasta en 4 pagos consecutivos”, expresó el ministro.
El operativo mosto es la segunda medida que lanza el Ejecutivo para incentivar a que se levante la cosecha. La primera fue la apertura de una línea de crédito a tasa subsidiada (del 17 y 19 por ciento) para que los industriales puedan elaborar y dar los anticipos a los viñateros para cosecha y acarreo.