En el Ministerio de Gobierno tienen avanzado un proyecto para crear una unidad policial que se dedique a atender, exclusivamente, casos de ataques contra mujeres. Con las denuncias de este tipo de hechos en ascenso, fuentes calificadas contaron que la idea es dotar a la nueva estructura, que quieren llamar comisaría de la mujer, con personal capacitado para instruir las causas judiciales que se disparen, hacer pericias y atender médica y psicológicamente a las víctimas. Hoy, el único organismo específico que hay es de carácter administrativo y depende de Desarrollo Humano.

El objetivo principal es brindarle una mejor contención a las mujeres que se deciden a denunciar abusos sexuales, agresiones físicas y maltrato psíquico, entre otras cosas, y a simplificar y hacer más efectiva la actuación policial. Lo intentarán hacer a través de un equipo de profesionales médicos, psicólogos y psiquiatras que estará las 24 horas en la nueva unidad y un cuerpo de efectivos policiales que serán capacitados previamente, explicaron.

Las fuentes aseguraron que las mujeres no se verán tan expuestas. Pasa que hoy deben hacer la denuncia en una comisaría, son revisadas por el médico legista en la Central de Policía y luego son trasladadas hasta otra dependencia si necesitan atención psicológica. Ahora, explicaron, una vez que expongan su caso, serán llevadas por personal policial hasta la nueva unidad y desde ahí se instruirá la causa judicial y se tomarán todas las medidas que requiera el caso, como atención médica para constatar lesiones físicas y psicológicas. Incluso, no descartaron que en el lugar se instale un alojamiento temporal para las víctimas que no puedan regresar a su casa por cuestiones de seguridad.

La otra utilidad que destacaron del nuevo sistema es la cuestión operativa de la Policía. Pasa que todos los casos de violencia contra las mujeres se concentrarán en la nueva dependencia y eso servirá para descomprimir al resto de las comisarías, que se podrán dedicar a los otros casos que regularmente reciben.

Las fuentes aseguraron que la medida de crear un área específica para los casos que se judicializan no tiene que ver con el incremento de las denuncias. Lo cierto es que las estadísticas muestran que van en franco ascenso.

Según información oficial, el Centro de Tratamiento Integral de la Violencia Familiar, que funciona bajo la órbita del Ministerio de Desarrollo Humano, recibió en la primera parte de este año 698 denuncias por agresiones físicas contra mujeres. Las cifras muestran una tendencia creciente en los últimos años. Siempre en el primer semestre, en 2009 ingresaron 392 denuncias, en 2010 fueron 586 casos y el año pasado se atendieron 676.

La iniciativa que baraja la cartera dirigida por el ministro Adrián Cuevas está a tono con la línea política que vienen siguiendo en los últimos años el Gobierno nacional y el provincial, al incluir como tema central de agenda la violencia de género contra las mujeres. La gestión kirchnerista impulsó, por ejemplo, el femicido (entre otros puntos, contempla prisión perpetua para los hombres que maten a su pareja) y la ley de violencia de género, mientras que la administración giojista sancionó la ley de violencia familiar, la de trata de personas y creó en todos los municipios oficinas que dependen de la Dirección de la Mujer.

Ayer, consultado por la nueva unidad policial para la mujer, el fiscal General de la Corte, Eduardo Quattropani, aseguró en el programa Insolentes, de Radio Sarmiento, que es una “muy buena medida”. Mientras que Cuevas no atendió los llamados telefónicos de este diario.