San Juan.- Fátima Funes Gez tiene 45 años y vive en San Juan. Puntana de nacimiento, fue adoptada por una familia con la que tuvo varios problemas. Si bien el padre siempre la trató muy bien, por parte de su madre adoptiva recibió sólo maltratos. Ella siempre sospechó que era adoptada y un día se animó a preguntar. Fue Jorge Funes Gez quien se lo confirmó.

Desde ese momento, dedicó gran parte de su vida a buscar a su madre biológica. ‘La señora, viuda de mi padre, me maltrató. Con su hijo también me llevaba mal. Sentí siempre el rechazo de ambos porque cuando llega un desconocido, alguien adoptado a un hogar suceden dos cosas. O lo amás o lo rechazás. Ellos me despreciaron siempre. Sólo mi padre me amó desde el principio, me adoraba y yo a él. Era una excelente persona por eso sembró tantos amigos y lo quiso tanta gente. Conmigo fue el mejor padre del mundo. La única persona que me trató bien en esa casa. Falleció en marzo de 2011. Su partida fue un golpe durísimo para mí’, contó a La República de San Luis.

Si bien no quiso brindar demasiados detalles, la mujer confirmó que en las últimas horas se produjo el ansiado reencuentro. “Tiene 61 años y está en una situación económica muy delicada y por supuesto tenemos vidas completamente distintas. Por ahora logramos conocernos, pude tomarle las manos y acariciarle la cara”, relató emocionada.