Con jarras sacan el agua potable que un camión les acerca una o dos veces por semana. Los más agraciados tienen una pileta cerrada para conservarla lo más limpia posible. Sin embargo la mayoría la tienen en tachos al aire libre. Es que la falta de agua potable es uno de los tantos problemas que tienen los vecinos que están a sólo 8 kilómetros del centro sanjuanino. Son cerca de 50 familias que viven en fincas en República del Líbano entre Calívar y Costa Canal, Rawson, y que tampoco tienen alumbrado público.
‘Vivo hace 57 años acá y hace más de 20 años que estamos peleando para tener agua potable. Nunca nos dieron solución. Hace unos años nos dijeron desde la Municipalidad de Rawson que estaba todo listo para hacer las instalaciones y todavía seguimos en la misma’, dijo María Vives, una de las vecinas afectadas. El agua potable se la lleva en camiones la comuna de Rivadavia.
Consultado sobre esta problemática, el presidente de OSSE, Cristian Andino dijo que durante su gestión no recibió ningún reclamo, pero aseguró que terminará con el problema. Agregó que verificará si esta gente está dentro de los convenios firmados con Rawson para proveer de agua potable, y si no están, buscará una solución. Por su parte, el secretario de Obras de Rawson, Rubén García, aseguró que ellos tampoco conocían la situación de esta gente.
Este no es el único problema de la zona. Es que el olor a basura y a animales muertos se percibe apenas se cruza la Calívar. En las calles de ripio, las bolsas y cajas, entre otras cosas, son una postal común.
‘Estamos olvidados. Por acá no pasa el camión a recoger la basura y encima la gente usa esta calle para tirar de todo’, dijo Adela Ruedas, otra vecina. De esta forma explicó esta problemática que se suma a la falta de alumbrado público que hace que la calle se convierta en una zona peligrosa durante las noches. Desde la comuna rawsina dijeron que también se pondrán al tanto sobre el servicio de luz.
