Varias son las curiosidades que tuvo la primera etapa de la Vuelta a los Valles Iglesianos. Antes de largar se inscribieron varios ciclistas de la zona, incluso destacados libres jachalleros, como Jorge Mura, varias veces ganador del Tour de San José. Además, los dirigentes del club organizador sudaron la gota gorda porque una fuga de aire en la boca del arco inflable provocaba que este se cayera. Después de varios intentos y de atarlo con un alambre pudieron elevarlo para que se hiciera la largada. Luego, para evitar inconvenientes, decidieron no ponerlo para la llegada.
EL VIENTO. Que es habitual en esta zona estuvo presente y fue protagonista durante toda la etapa. En el viaje a Angualasto (de subida) los empujó de cola y en el regreso castigó duramente de frente y costado a los ciclistas.
LA ÚLTIMA. Hoy, desde las 10, se disputará la última etapa. Serán 105 kilómetros. Se largará desde el hotel de Pismanta y luego de viajar y volver a Tudcum, capital de los dulces regionales, volverá a Rodeo para terminar con cuatro giros al clásico triángulo que conforma la ruta 150 con la calle Santo Domingo.