Ya lo había dicho el pope: el programa se puede hacer perfectamente sin él. Y es que con 21 años de experiencia en el rubro, recursos no le faltan a Marcelo Tinelli para sostenerse en el podio y suplir la ausencia de Ricky Fort (con quien ayer se reunió en Miami). Tras un lunes donde aventó el escándalo por el intempestivo faltazo del chocolatero y un martes con la lengua filosa de Polino en el atril del jurado, ayer Marce concretó y sacó a la pista a Laurita. Y con ella redondeó una semana generosa en términos de rating (hoy el ciclo no sale al aire, porque Marce sigue de relax). ¿Pero quién es Laurita? se preguntará algún desprevenido.

Al centro en la foto, aspirante a mediática. La que paladeó sus minutos de fama en la vidriera más grande de la TV argentina se llama María Laura Gaffuri, es modelo y promotora, 25 añitos, 1.74 de altura y 89-59-90. La muchacha -que hace algunos años confesó que le gusta llamar la atención, que se reconoce ambiciosa y que tiene en su haber osadas producciones fotográficas (basta ver la última de revista Hombre)- se presentó al casting "Buscando a la novia de Ricardo Fort" y quedó en banda luego que el millonario eligiera a Erika Mitdank. Entonces comenzó el nuevo jueguito: engancharla con Marcelo, el soltero más codiciado del país. El guiño prendió y desde entonces la esbelta morocha ocupa un lugar cuasi destacado en el plató de ShowMatch, desde donde hace algunos bolos que incluyen la presencia de sus padres en papel de futuros suegros, enojitos y escenas de celos con su pretendiente-pretendido. Pero anoche, Laurita tuvo su propia cuota de baile… y -obvio- de show.

Al ritmo de Tom Jones y Madonna, y "aprobada" por el jurado, encabezó un cuadro musical junto a las bailarinas del staff, que antes y después -tal es la historia- le mostraron cara fea. Pero los que resolvieron el paso de comedia fueron los desopilantes Belén Francese -convertida en la guardabosque de Tinelli- y Flavio Mendoza -que también lucha por el amor del conductor-, quienes marcaron bien de cerca a la "intrusa". Pero la poetisa y el coreógrafo, que estaban unidos para cuidar a Marcelo, terminaron discutiendo y forcejeando con el propio Tinelli y su flacuchento nuevo custodio (el que sacó de entre las filas de la producción para llenar el espacio vacío que dejaron los gatos de Fort). Y así pasó otra noche donde éste y otros gags mantuvieron el rating de ShowMatch bien calentito (hoy Ibope dirá cuánto).

Horas antes de salir al aire el envío -que fue grabado-, Ricky y Marce se juntaron en Miami, tal cual estaba previsto y como lo confirmó el chocolatero ayer por la tarde en comunicación telefónica con Éste es el show. Allí dijo que el lunes volverá a ShowMatch (hoy estaría de regreso en el país) y que leerá un discurso con los motivos por los que abandonó el programa.