Protagonista del escenario político minero nacional, el sanjuanino Jorge Mayoral permanece en el ojo de la tormenta desde el veto a la Ley de Glaciares y luego del acuerdo tributario logrado entre Argentina y Chile para Pascua Lama. Trascendieron versiones acerca de que habían pedido su dimisión desde la Comisión de Minería de la Cámara de Diputados de la Nación. Pero finalmente las amenazas quedaron en la nada. Y el funcionario aseguró tener “todo” el respaldo político para continuar en el cargo. En una extensa charla con CUYO MINERO, habló a fondo de todos estos temas.
-En su exposición usted dijo que esta versión que había trascendido sobre diferencias entre Hacienda y Minería sobre las prerrogativas del tratado minero a favor de Barrick eran un acto perverso. ¿De parte de quién?
-No, yo digo que las consideraciones que políticamente se hacían sobre el tratamiento de este tema, sobre todo por el nivel de prejuicio con que se encaraba la información, parecía que periodísticamente no se estuviera hablando de rellenar un agujero normativo en este tipo de proyectos, en los temas tributarios, sino que se estuviera hablando específicamente más que de un proyecto, de un operador. Y la palabra de un operador contaminaba cualquier análisis. Le quitaba objetividad. En ese sentido me parece que eran demasiado perversas las consideraciones.
La pregunta que me hicieron (durante la exposición, el martes 14 de julio) es cómo había sido la convivencia entre los diferentes funcionarios de los diferentes ministerios durante este proceso de negociación y si estas diferencias habían hecho que algunos funcionarios del Ministerio de Economía hayan tenido que renunciar, no estando de acuerdo con el proceso. Y yo dije rotundamente no. En el proceso se fue un subsecretario, pero el proceso de negociación excedió los cuatro años. Y en ese plazo se puede ir un subsecretario o un ministro por una infinidad de razones.
-Lo que pasa es que, sumado esto al tema del veto de la Ley de Glaciares, que usted también mencionó, es como que sigue rondando el fantasma en algunos medios de Buenos Aires sobre el poder de lobby que tendría Barrick. ¿Qué le responde a eso?
-No, la cuestión del veto a la Ley de Glaciares se instrumentó a partir de que el Ejecutivo piensa que esa es una ley concebida poco democráticamente para el crecimiento simétrico de todo el país. Fundamentalmente, en atención a los intereses de la Argentina federal. Yo me pregunto desde el punto de vista de la apreciación conceptual de la Ley de Glaciares: ¿se han puesto a pensar qué hubiese pasado con el desarrollo de la obra pública en zonas de frontera con la Ley de Glaciares?
-El tema es que teniendo la posibilidad de interpretar esta lectura, hay sectores de medios y sectores políticos de Buenos Aires que optan por interpretar de otra manera. Y reitero: vuelven a esta hipótesis del lobby de Barrick.
-Con respecto a la Ley de Glaciares yo no tengo la menor duda de que es porque el veto lleva mi firma. Entonces, ¿quién vetó esto? Y, lo vetó la Secretaría de Minería de la Nación. Lo firmó Jorge Mayoral. Entonces no hay duda: el lobby es del sector que juega en la minería. Cuando en realidad la ley generaba problemas también en la obra pública.
-Lo cual no implica que el lobby sea de una empresa privada en particular…
-No, no. Era un problema de la minería, de la construcción, de la industria de las vías de comunicación, de la industria de la ciencia y la tecnología porque tampoco permitía las bases en la Antártida. Bajo el concepto de las “superficies peri-glaciares”, nada de eso se podía hacer. Quedaría vedada la posibilidad del macizo andino de hacer nada. ¿Por qué critican al sector? Porque el veto lleva la firma del secretario de Minería de la Nación. Esa es la respuesta. Y justo da la coincidencia de que nos encuentra en el proceso de trabajo de estas cuestiones tributarias por el proyecto binacional. Es como que se armó una película que de alguna manera tenía una línea argumental consistente.
-¿Cuánto tiempo le queda a Jorge Mayoral al frente de la Secretaría de Minería de la Nación?
-La respuesta tiene dos aspectos. Primero una consideración: todos los que formamos parte del Ejecutivo tenemos el cargo a disposición de quienes son los responsables de las áreas que representamos. Esto es natural. Es el día a día. Ahora, yo formo parte de un gobierno que ha sido elegido hasta diciembre del 2011. Y yo no tengo ninguna consideración para decir de esta cuestión.
-Pero hay funcionarios del gobierno nacional -y perdón por la comparación porque no sé si ofende- como Guillermo Moreno, que tienen un frente de resistencia interno interesante. ¿Es el caso o no es el caso de Mayoral?
-No me ponga en la comparación porque es odioso compararse con un compañero de Gabinete. Pero yo he sentido algunos gestos de todo el respaldo político interno.
-Los proveedores mineros están demandándole a Barrick definiciones puntuales sobre el cronograma de Pascua Lama, para no jugar en desventaja con la competencia chilena. ¿Minería de la Nación está al tanto?
-Sí, estamos absolutamente al tanto. La última reunión se hizo en las oficinas en Buenos Aires, entre proveedores de servicios mineros y gente de la industria nacional, donde se trató el tema de la sustitución de las importaciones. Mi sugerencia a los proveedores mineros de Argentina es que no descansen y que vinculen fuertemente su accionar con los responsables del proyecto. Porque si nos dormimos es posible que se les complique el escenario a ellos para tratar de tener una posición importante dentro del proyecto. Los acompañamos absolutamente porque creemos que el fenómeno más impactante que produce la actividad minera es el desarrollo de los proveedores locales. Y al mismo tiempo les sugerimos que intensifiquen su relación con el proyecto y con los responsables del proyecto.
-En la exposición que se hizo sobre el acuerdo tributario para Pascua Lama se habló de que tanto en lo referido a IVA como a Ganancias, el proyecto tributa como cualquier otra actividad. ¿Y la Ley de Inversiones Mineras se aplica o no se aplica ahí?
-¿En qué aspecto?
-¿La ley de inversiones mineras no da beneficios respecto de esta tributación? ¿No es que la minería tiene condiciones tributarias distintas de otro tipo de actividades industriales merced a esta Ley de Inversiones Mineras?
-La ley sobre todo genera beneficios para la instancia de riesgo del desarrollo minero. Esto es: la etapa prospectiva y la exploratoria. Este concepto que hay del escenario tributario de excepcionalidad le pega a la minería solamente en la actividad prospectiva y exploratoria. Ahí están las devoluciones de IVA y demás. Cuando los proyectos empiezan a marchar dentro del escenario estrictamente productivo, tributan como cualquier otro proyecto de cualquier otro sector.
