YPF rebajó la calidad de su nafta súper y en los surtidores sanjuaninos desde marzo también se vende ese combustible de menor octanaje, según confirmaron voceros oficiales de la petrolera. ‘Eso efectivamente es así, pero la compañía se mantiene con los mínimos que dispuso la Secretaría de Energía de la Nación, que indica que la nafta súper debe tener un mínimo de octanaje de 93, con lo cual el octanaje se mantiene dentro de esos parámetros’, dijeron voceros de la petrolera a DIARIO DE CUYO. Eduardo Margarit, presidente de la Cámara de Combustible, dijo el sector no fue informado de tal cambio. ‘No tengo conocimiento de que se haya bajado la calidad, no se nos ha comunicado’, dijo Margarit. No obstante, los voceros de YPF aclararon que ‘nada exige que cuando una nafta suba o baje de octanaje se debe avisar. Lo único que se exige avisar al consumidor es si una nafta es de grado 2 o de grado 3, o sea si una nafta es super o nafta premium’. El octanaje es un número que indica la resistencia del combustible a detonar de manera prematura. Los motores modernos, que tienen mayor relación de compresión, necesitan alto octanaje. Pero la mayoría de los automovilistas lo desconocen. El ingeniero David Samat, del Instituto de Ingeniería Mecánica de la Universidad Nacional de San Juan, Walter Sánchez, gerente de posventa de Señor González; Eduardo Tello, gerente de servicios de Fiat y Moreno, jefe de taller de France Motors, explicaron los peligros.

1- El ‘pistoneo’: ‘Es el primer síntoma, cuando el auto hace mal la detonación y tiene una combustión anormal empieza lo que vulgarmente se llama ‘pistoneo’, explicó Samat. El número de octanos está relacionado con la compresión del motor, y deben ser alto para que éste no se rompa. ‘El primer síntoma es que la potencia con que fue entregado no será la misma, al motor le costará tomar revoluciones’, agregó González. Moreno y Tello también coincidieron en las fallas de detonación, que terminan afectando los pistones.

2- Rotura de motor: ‘Los motores de altísima tecnología, no sólo en la inyección sino en los materiales que componen el motor (cilindro, bloc, válvulas de tapas de cilindro) se van a ver afectadas por una nafta de mala calidad’, dijo Sánchez. Agregó que si el cliente usa el auto a alta velocidad y constante -por ejemplo que diga, yo me voy a Buenos Aires, a 150 kms- se va acelerar el problema. El arreglo de un motor en la actualidad cuesta aproximadamente de $25.000, en adelante. ‘El tiempo dependerá de las condiciones de manejo, si anda rápido y a velocidad constante, el auto le va a pasar factura’’, dijo Samat.

3- Falso ahorro: ‘La gente está equivocada, porque busca súper por la economía del bolsillo y no existe. La diferencia entre súper o premium es de 30 a 40 centavos, pero los motores actuales, de alta relación de compresión, rinden más con la premium. Si le da un promedio de 15 km por litro con la súper, con la premium le va a dar 16; al tener mejor octanaje rinde mejor el motor’’, explicó Eduardo Tello, de Fiat. Lo dice el fabricante en los libros. para los modelos hasta 2005 nafta súper de ahí nafta premium.

4- Modelos nuevos: el problema existe para los autos modernos, algunos mencionaron a partir del 2000 y otros, a partir del 2005. Samat explicó en los años ‘30 un Ford T tenía una relación de compresión de 5:1 y usaban naftas de bajo octano, en los ‘70 la compresión era de 8:1 y la nafta, de 90 octanos. En el año 200 la compresión del motor llegó hasta 10:1 y en el 2005, lo superó. Para autos de 2005 en adelante se deben usar entre 95 y 100 octanos’’, dijo.

5- Garantía: ‘Acá el 50% de la gente que compra el Toyota Corolla, por ejemplo, le echa nafta súper, porque el manual dice que se puede ocupar nafta de 95 octanos. Creo que la fábrica va a tener que tomar alguna medida de comunicación al cliente porque se va a ver afectada la garantía de los motores 0 km’’, dijeron en Señor González.