En el tire y afloje en el que se ve involucrado el gobierno, que el pasado martes comenzó a definir su estrategia junto a la AFA para "recuperar al producto fútbol", aparece ahora -según publicaciones periodísticas- un jugador que ejercerá presión: La AFIP.

Así como era un secreto a voces que luego de la rescisión unilateral del contrato entre la AFA y TSC (Televisión Satelital Codificada) vendría el acuerdo con el gobierno. También lo es que en la puja personal que tiene el ex presidente Néstor Kirchner con el Grupo Clarín, la Administración Federal de Ingresos Públicos, pasará a ocupar un espacio importante.

Según se publicó en el sitio de Internet "periodicotribuna.com"," Ricardo Echegaray, titular de la AFiP dio instrucciones precisas a los subdirectores de operaciones impositivas metropolitanas y de grandes contribuyentes nacionales para que investiguen a Marcelo Bombau, presidente de TSC y TyC Sports, por supuesta evasión fiscal y/o lavado de dinero". Echegaray, es el mismo que en su momento fue participe principal de la acusación al dirigente Francisco De Narváez de estar vinculado al narcotráfico.

Ayer TSC publicó una solicitada en los matutinos capitalinos en la que consideró "demagógico hablar de «fútbol gratis para todos»". Y ratificó que reclamará ante la AFA y cualquier otro responsable, administrativo, civil o institucional por la decisión arbitraria", de incumplimiento de contrato.

En otra nota, de la misma publicación, titulada "lo que viene, lo que viene", se hace referencia que el próximo paso del litigio Kirchner-Grupo Clarín, pasa por el automovilismo. Y aquí también juega de centrodelantero la AFIP, porque según se señala "los equipos cuentan con un sistema de facturación distinto"

De ser cierto todo esto, a nosotros los argentinos comunes y corrientes ¿qué camiseta nos toca? Porque ya estamos cansados de poner el hombro y mirar de afuera.