Brasil, 23 de julio.- Ronaldo llegó la conclusión de que ya está grande y que su “cuerpo le está pidiendo parar”, después de verse incapaz de superar con facilidad ciertas lesiones que en otro momento de su carrera le hubiesen requerido mucho menos tiempo de rehabilitación.

Además del supuesto sobrepeso que exhibe desde que llegó al Corinthians, el delantero comenzó su vía crucis hace exactamente un año. El 26 de julio de 2009 Ronaldo se fracturó el tercer y el cuarto metatarso de la mano izquierda ante el Palmeiras. Esa lesión, que parecía mínima, lo mantuvo fuera de los terrenos de juego durante dos meses.

Esos 60 días sin jugar algún partido profesional deterioraron en exceso el buen primer semestre que había tenido el pasado año. Justamente, el médico del Timao imputa a su precipitado retorno a los campos de juego todos los problemas que está sufriendo en la actualidad.

"Ronaldo tuvo mala suerte con una racha de lesiones que lo mantuvieron inactivo todo este tiempo: primero fue un golpe en las costillas y luego se lesionó dos veces la pantorrilla, eso fue el colmo de lo negativo. Esta vez, el futbolista sólo volverá a jugar cuando su musculatura esté totalmente equilibrada. No queremos que vuelva a recaer", dijo Grava, el doctor. ¿Diciembre será el límite para que la gente lo vea en los campos de juego?