Su primer partido como árbitro fue un Desamparados-Alianza y su último encuentro un Villa Obrera-Del Bono. No se olvida más de todo lo que vivió durante esos 32 años de carrera y Horacio Manrique sólo resume en una frase lo que fue el arbitraje en su vida: "Me entregó todo. Me dio todo". Agradecido por lo que le tocó vivir, hoy el popular árbitro sanjuanino admite que gracias a ser juez en el fútbol se hizo conocido en San Juan, en el interior del país. La cosecha de amigos fue enorme y los recuerdos de aquellos momentos inolvidables también.

"Yo entré al mundo del arbitraje de la Liga gracias a Francisco Serignano. Yo dirigía amateur con mi club, Falucho de Concepción y me buscó. Me invitaron a la Liga Sanjuanina y ahí empezó mi historia. Pude dirigir lo mejor de lo mejor en San Juan, estuve un año entero en Mendoza, viví clásicos regionales como el de Salta o los de Tucumán y mi partido más importante fue el River campeón del mundo de 1986 que vino a jugar contra Desamparados en nuestra provincia. Todavía me quedo mirando el póster que tengo junto al Beto Alonso", contó Horacio.

Pasaron muchos encuentros y hoy, su vida está emparentada con el vóleibol. Se acercó a través de su actividad gremial en UPCN y reconoce que lo atrapó: "Es otro mundo. Yo estoy haciendo el curso de árbitro en vóleibol para poder comprender mejor muchas cosas. Yo creía que era como en el fútbol pero nada que ver. Conocí mucho, viajé mucho con el club y disfruté de cosas que sólo tiene este deporte".

Como hombre multifacético, Manrique también planea volver a la Comisión de Neutrales de la Liga: "A mi la Liga me dio muchísimo. Soy un agradecido de todo lo que me aportó como persona y como árbitro y por eso me acerqué a Neutrales para colaborar en el mejoramiento del arbitraje de San Juan. Estuve y hoy no estoy pero planeo volver el año próximo para sumar mi trabajo".

SUS ELEGIDOS

Su debilidad es el vóleibol: "Yo elegiría a todos pero me quedo con Olteanu. Un señor en todo el sentido de la palabra. Hasta cómo hablar enseña. Es un profesional y una gran persona".

En el rubro de los técnicos, no duda: "Fabián Armoa es un excelente armador de grupos. Creo que esa es su principal virtud: saber elegir personas para sus equipos".

Finalmente, en el fútbol, se la juega: "Me gusta mucho lo que hicieron Luis Ardente y Emmanuel Mas pero me encanta lo que le pone Santiago Ceballos cuando juega para Desamparados. Siempre está, siempre deja todo".