El entrenador interino del seleccionado argentino de fútbol, Sergio Batista, quitó relevancia a su primer resultado adverso al caer ante Japón 1-0 y resaltó el desgaste que tuvieron los jugadores por el largo viaje a Lejano Oriente y por el cambio horario, que para él derivaron en las lesiones de tres jugadores. "Ni cuando le ganó a España era la gran selección ni ahora es el peor", apuntó Batista al recordar que pidió que la AFA no mensure su gestión por resultados sino por su trabajo. Si bien señaló que si lo juzgan por los resultados "no depende de mí", pero que si lo hacen resaltó: "voy ganando dos a uno".

Batista apuntó al desgaste "de doce horas de viaje y en el caso de Andrés D’Alessandro -juega en Brasil- de 35", "el escaso entrenamiento" y el desgaste de partidos: "la mayoría son jugadores de Champions". "Se arrancó bien, emparejaron un poco, a los diez minutos teníamos dos jugadores desgarrados y no pudimos definir las llegadas", dijo Batista, en referencia a los interistas Diego Milito y Esteban Cambiasso, aunque luego bajó el nivel del alerta, al desear que solo "sean molestias".

Luego fue el turno de la lesión de Mario Bolatti, quien justamente había reemplazado a Cambiasso. Asimismo, a modo de reconocimiento admitió que salió "un partido que no queríamos" y que se perdió ante "un gran…buen equipo", corrigió. Batista elogió a los futbolistas al sostener que el grupo "se bancó este partido porque después del desgaste del viaje, el cambio de horario y el entrenamiento, era muy difícil salir a un campo de juego".