Era su primer partido tras el alejamiento de Enrique Hrabina por los malos resultados cosechados que llevaron a perder la cima de las posiciones. Llegó el martes pasado y ese mismo día metió mano al equipo. Varió el esquema y dispuso tres cambios. No por capricho sino porque su estilo de juego lo manda y San Martín lo sabe de su anterior proceso, donde defender con tres y ser ofensivos es su marca registrada (se paró con un 3-4-1-2). Pero eso se vio en los minutos iniciales y luego todo cambió. Tranquilo y con la confianza que todo se puede revertir, dio sus explicaciones sobre la derrota en la vuelta por segunda vez a la dirección técnica del Verdinegro: "En esta instancia no te podés equivocar, te pasa y lo pagamos caro porque lo teníamos controlado hasta el penal, después lo padecimos y nos costó el resto del partido".
El entrenador que llevó al equipo a Primera División hace tres años, continuó explicando el porqué de la dura caída: "Hay detalles que no te pueden pasar a esta altura en donde hay poco tiempo de recuperación y donde rápidamente lo tenemos que revertir. Está claro que nos equivocamos y nos costó caro".
El aliciente para Teté es que apenas tuvo tres días con sus nuevos dirigidos antes del viaje y no pudo ondar en lo profundo para cambiarle la cara al equipo. Pero lo intentó y porque no tuvo una semana entera de trabajo tiene un justificativo. Ahora se le viene Italiano el viernes, donde según expresó en su llegada "sé que me van a recibir con los brazos abiertos" tiene al aval de los hinchas, pero el fútbol vive de triunfos y Quiroz deberá meter mano dura para que el Verdinegro vuelva a ser el de antes.