De los once futbolistas que salieron a la cancha el domingo ante Gimnasia, Pablo Cantero es quien tiene más ascensos en su trayectoria con un par. El Pupa, como se lo conoce al volante de 33 años, consiguió ambos con otro santo del fútbol argentino como el tucumano, que justamente perdió la categoría anteayer por la noche y frente al clásico rival del Verdinegro como es Desamparados. Después de los primeros 90’ de la Promoción, una palabra autorizada como él analizó el encuentro y lo que se viene de cara a la revancha, donde Cantero remarcó que deberán jugarlo como en las visitas a Unión y Atlético Tucumán, sin dudas los dos grandes triunfos del equipo de Daniel Garnero en esta recta final. Y por último habló de lo que sería otro ascenso con este Santo y en parte matizar el dolor por la pérdida de la categoría del club tucumano, donde pasó del Argentino A a la Primera División.
-¿Se dio el partido ante Gimnasia como lo esperaban?
-Te diría que sí. Sabíamos que era clave el tema de controlar la mitad de la cancha y así fue. Gimnasia tiene jugadores con buen manejo y mucha dinámica en esa parte del campo. Pienso que lo ganamos bien, incluso sobre el final podríamos haber ganado por otro gol más.
-Saber que ahora la presión es para ellos porque deben ganar, ¿cambia en algo la forma de afrontar la revancha?
-Por ahí inconcientemente uno lo afronta de otra manera, pero no hay que confundirse. Nosotros debemos salir a jugarles como hicimos en Santa Fe ante Unión y en Tucumán contra Atlético. Además, tenemos muy claro que si les hacemos un gol ellos nos tienen que marcar dos, algo que pocas veces nos pasó en este cierre de temporada.
-¿Puede beneficiarlos que Gimnasia esté muy confiado en que, por tercera vez consecutiva, va a dar vuelta la serie de Promoción?
-Me parece que es algo lógico. Gimnasia debe ser el equipo con más experiencia en promociones del fútbol argentino. Está bien que piensen así, pero nosotros sabemos que no les seremos un equipo fácil. Se las vamos a hacer bien difícil y todos tenemos el sueño de traernos el ascenso.
-¿Tu experiencia en esta clase de instancias, te lleva a esperar de otra forma los partidos?
-Por ahí ahora trato de no jugar tanto a mil. De pensar un poco más y no jugar sólo con el corazón. La presión siempre está de mi lado porque soy alguien muy exigente y debido a mi edad, en este caso, no sé si voy a jugar otro partido por un ascenso a Primera. Trato de disfrutarlo, pero cuesta mucho.
-Cuando llegaste como refuerzo para este año no tuviste casi minutos con Franco, ¿pensabas que el final de la campaña podía darse así en lo personal?
-Por ahí lo veía muy complicado a un cierre de esta manera. No por San Martín, porque estuvo a lo largo de toda la temporada entre los cuatro primeros y siendo protagonista, pero sí por mí porque no jugaba y llegaba a un equipo que terminó segundo el 2010. Pero esperé siempre mi chance y por suerte la tuve.
-Parece que si tenés un ascenso, tiene que ser con un San Martín.
-Sí. Se dio así y ahora voy por mi tercer Santo ascenso (sonríe). La verdad que lo que pasó en Tucumán anoche (por el domingo) me puso triste, pero el fútbol es así y cuando las cosas no se hacen bien, se paga de esta manera. Si bien no va a compensar esa tristeza, pero ascender con San Martín sería algo lindo y que taparía en algo esa amargura.

