Emociones, sobraron. La última que quedó para Colón fue la menos deseada, mientras los jugadores de Andino tardaban en dejar la cancha del Bodeguero de calle Sargento Cabral por la celebración del 3-2.

Fueron los primeros 90 minutos del choque por la Tercera Fase del TDI, que se completará la semana que viene en cancha del equipo riojano.

Comenzó mejor la visita, jugando lejos de su arco aunque también mostró rápido que era vulnerable en el juego aéreo y a los 7 minutos, Franco Díaz se perdió debajo del arco abrir el marcador luego de un tiro libre. Esa pelota fue despejada por un defensor del equipo riojano y del corner, Jorge Carrizo apareció solo en el segundo palo y cabeceó para el primer festejo de la tarde.

El gol provocó que Colón sumara confianza, mientras que los jugadores de ‘El Torito’ riojano, hicieron bandera del apodo y embistieron varias veces para cortar el juego del Merengue, por lo que en un par de oportunidades hubo tumulto con empujones y un par de manotazos también.

En el inicio del complemento, a los 4 minutos Andrés Pérez desbordó por izquierda y asistió a Mario Agüero, quien, con el arco a su disposición, sacó un remate alto.

El DT de Andino modificó su franja derecha y se equilibró el juego. A los 16, tras una infracción a Wilson Ruarte no sancionada por el árbitro Sosa, el equipo riojano llegó hasta la puerta del área de Colón, y ahí ‘El Cheto’ Martínez sacó un remate rasante y esquinado, de media vuelta, que Luis Mingolla alcanzó a manotear en su estirada, pero la pelota decidió entrar pidiendo permiso al arco.

A los 21, en otro centro de Colón, el defensor Marcos Luna puso la mano en la línea de gol para evitar el gol y vio la roja. Marín, luego de 3 minutos de suspenso, ejecutó el penal para poner 2-1 a Colón.

Y cuando las calculadoras del local pedían el tercero pensando en la revancha (Campos tuvo una a los 32), Andino pagó con la misma moneda a los 38. Tiro libre al área, Mingolla calculó mal el pique de la pelota y cuando corrió por ella el arquero, ésta rebotó en el vértice y el rebote quedó para que Fernández la empujara a un nuevo empate.

Si ese fue un balde de agua fría para el local, faltaba que 4 minutos después, Mercado aprovechara dos segundos de libertad para esperar que se le acomode al balón a un derechazo de 25 metros que fue un misil al ángulo. Así, Andino se quedó festejando unos minutos en la cancha.