El secretario de Seguridad, Sergio Berni, acusó ayer a dirigentes de Boca de “complicidad” con las barras bravas, sea por “acción” u “omisión”, le endilgó haber gestado “un monstruo de mil cabezas” y pidió a los jueces investigar “con decisión y coraje” la connivencia de los directivos del fútbol con los grupos pesados como los que se enfrentaron a tiros dejando dos muertos y seis heridos cerca del Nuevo Gasómetro.
Si ya Berni, nuevamente cabeza visible del Gobierno Nacional ante estos hechos, había hablado por varios medios horas después del homicidio de dos hinchas por la puja interna de La 12, casi que explotó tras las declaraciones del presidente de Boca, Daniel Angelici, quien dijo que “es muy fácil identificar a los violentos” pero que “ni el Estado ni la AFA llaman para resolver el tema de la violencia”.
“Al escuchar las declaraciones del dirigente de Boca Juniors entiendo por qué esta pasando lo que está pasando en el fútbol y detrás de estas declaraciones no me cabe ninguna duda que hay una gran complicidad en cuanto a la generación y la creación de ese monstruo de mil cabezas que se viene gestando desde hace mucho tiempo con la complicidad no solo de los dirigentes del fútbol”, reaccionó Berni por radio Continental.
El funcionario dobló la apuesta y aseguró que además de querer encontrar a los homicidas de Marcelo Carnevale y Ángel Martín Díaz, también busca a los dirigentes que, según considera, le dan vía libre a las barra.

