Racing Club desaprovechó anoche su momento favorable, Tigre reaccionó, le empató 1-1 y al final inclusive estuvo cerca de dejar a la Academia con las manos vacías. En Victoria y por la primera fecha del torneo Apertura, la formación albiceleste jugó mejor durante la primera etapa, la que ganó por una conquista del siempre peligroso Teófilo Gutiérrez. Es más, en el segundo período el cafetero pudo haber ampliado la diferencia, pero luego Tigre corrigió errores, Diego Morales pasó a distribuir inteligentemente la pelota y el 1-1 lo aportó Ramiro Leone.

Fue un primer tiempo discreto, sin demasiadas ocasiones de riesgo, pero Racing al menos fue un poco más incisivo que el local, teniendo a su hombre más punzante en Teo Gutiérrez. El equipo de Diego Simeone salió decidido a pararse en campo del adversario y ganar rápidamente la pelota para dispararse hacia adelante, pero en la mayoría de las ocasiones equivocó el camino y chocó contRa la defensa tigrense. Por su parte, los locales no estuvieron acertados con el balón y sólo utilizaron como recursos para habilitar a sus delanteros los pases largos y alguna acción originada con el balón detenido.

Racing abrió el tanteador a los 25′, tras el centro de Lucas Castro para la llegada de Gutiérrez, quien definió sin dificultades. Lo mejor de Tigre se produjo sobre el final de la etapa, con un remate de Emanuel Pío, desde 30 metros, que tapó Sebastián Saja.

El local también pudo haber empatado cuando Diego Castaño recogió un rebote y su disparo dio en el travesaño. En el segundo capítulo, el conjunto de Avellaneda pareció que se llevaba por delante a su rival, pero con el correr de los minutos fue apagando su intensidad y Tigre empezó a generarle inconvenientes.

Rodolfo Arruabarrena acertó al incluir a Ezequiel Maggiolo por Pío y retrasar a Morales a la posición de enlace. Otro acierto del entrenador de Tigre fue hacer ingresar al juvenil Javier Carrasco, quien fue clave en el gol de Tigre. A los 29′, Carrasco desbordó por la derecha y mandó el centro que capitalizó Leone. Racing se desordenó tras la igualdad, perdió el control y Tigre con más ímpetu que buen fútbol dejó la sensación de que puedo haberse quedado con el triunfo.