Desconocido. Lio Alcaraz cambió los guantes de arquero por la ropa de minería y hoy hace un paréntesis en su carrera.

 

Dicen que los arqueros cuajan en la madurez. Que la mejor edad para atajar está en el umbral de los 30 años porque sumó experiencia y oficio a todo lo que traían de la cuna y a lo que perfeccionaron. Es la edad justa pero para el sanjuanino Lionel Alcaraz hoy es la hora del hasta pronto. Es que condicionado por la pandemia, sin fútbol en todo el 2020 y con un incierto panorama, el arquero que surgió en Sportivo Del Bono hace ya más de 11 años atrás, hoy prioriza el trabajo y ser parte de la minería de alta montaña es su destino desde hace al menos 6 meses al pie de la cordillera. Le duele esa elección pero con la madurez que le dan sus 27 años, sabe que es lo primordial hoy, aunque no se despidió del fútbol.

"Es una situación dura y creo que muchos colegas del ambiente del fútbol lo tienen que haber pasado o lo están pasando. Fue duro lo del coronavirus y de un día para el otro nos dejó sin clubes, sin chances de hacer nada. La pasamos mal y sé que hubo intentos de ayudarnos pero en lo personal, salió la opción de estabilizarme en Malvar, una proveedora minera de Iglesia, y tuvo que decidir", cuenta Alcaraz que en esta semana vuelve a subir a cumplir su turno.

Empezó muy pibe en Del Bono, debutó en Primera División con 16 años y desde ahí, su derrotero no paró mas. Sportivo Picón, Independiente Villa Obrera, Árbol Verde y la primera incursión en el fútbol departamental con Los Andes de Tudcum donde consiguió torneos iglesianos y en 2018 la primera Copa de Campeones para el club andino. Jugó también en San Martín de Rodeo, con un regreso al fútbol capitalino para vestir la camiseta de Atlético Alianza.

"Fue una experiencia muy buena lo que viví en el fútbol departamental. Conseguimos cosas lindas, importantes y se forjaron muy buenas relaciones humanas que hoy sirvieron para darme este presente. Duele dejar de lado el fútbol pero son elecciones que hay que hacer".