Los volantes Leonardo Ponzio y Marcelo Estigarribia podrían convertirse en nuevos jugadores de River Plate, que se sigue preparando para su debut en el torneo 2011/12 de la Primera B Nacional de fútbol, el martes de la semana próxima como local ante Chacarita. En cambio, la llegada de Diego Valeri amenaza con quedarse en una ilusión: el volante se encaminaba a a arreglar su situación con Lanús, que lo había separado del plantel profesional por problemas en la renovación de su vínculo.

Ponzio, que ya tiene arreglado su contrato con River, buscaba a estas horas destrabar definitivamente su situación con Zaragoza, de España. Su argumento para conseguir la libertad de acción es una deuda de 600.000 euros que el club mantiene con él.
Aunque el DT del equipo aragonés, Javier Aguirre, lo considera fundamental en su estructura táctica; y aunque Zaragoza cedió ayer al Siena al italiano Matteo Contini (lateral derecho, posición en la que Ponzio también puede desempeñarse), el ex Newell‘s insiste en imponer su deseo de volver a la Argentina.

El caso de Estigarribia parece más encaminado todavía: sin club en Europa tras cancelarse la posibilidad de obtener el pasaporte comunitario, su representante, Pedro Aldave, mantenía reuniones con la dirigencia de River para ultimar los detalles del arreglo.
El volante paraguayo, que jugó la pasada temporada en Newell‘s Old Boys, viajó ayer con su Selección para jugar un amistoso con América de México, pasado mañana.

En el camino inverso, los dirigentes analizan ofertas (y esperan nuevas) antes de definir algunas ventas: los grandes candidatos a dejar el club son el defensor Jonatan Maidana (hay una propuesta del Evian, de Francia, por 3,5 millones de dólares), el volante Roberto Pereyra y el delantero Rogelio Funes Mori.