Desde el presidente de San Martín, Jorge Miadosqui, pasando por el técnico, Daniel Garnero, y terminando en los futbolistas, todos hablaron a principio de semana que ante Patronato el domingo se van a jugar todo pensando en darle oxígeno al sueño de ascender de forma directa. Ayer, el DT diseñó un trabajo táctico de más de media hora, no la clásica prueba de fútbol semanal que recién será esta tarde, pero sí movimientos que dan a pensar que tiene decidido meter mano en el equipo y hacerlo mucho más ofensivo sabiendo que los tres puntos en Entre Ríos resultan claves para llegar a la fecha final con posibilidades de arrebatarle el ascenso a Unión.
El trabajo que diagramó Garnero en la mañana del Hilario Sánchez fue de la defensa titular más un volante por un lado, siendo atacados por los delanteros y volantes creativos suplentes. En ese sentido paró lo que ya no es sorpresa con Pocrnjic en el arco; Galarza, Grabinski, Zamponi y Mas en la defensa, más Scatolaro de cinco, siendo el único que no iría de movida. En la otra mitad de la cancha estuvieron el doble cinco compuesto por Alderete-Cantero, adelante de ellos un tridente integrado por Roberval, Quiroga y Poggi, mientras que de nueve neto, Penco. Este sistema de 4-2-3-1 lo utilizó Garnero en el choque ante Gimnasia en Concepción, pero con Messera de enlace. Esta vez Mariano no podrá estar en Paraná ya que todavía continúa recuperándose de la contractura en su isquiotibial izquierdo y estará disponible para el último choque de la temporada ante Belgrano.
Esta propuesta táctica de Garnero, de confirmarse, tiene más que ver con la idea táctica de su antecesor, Darío Franco, que con el 4-4-2 que utilizó en la mayoría de los encuentros que dirigió al equipo y que le dieron sus buenos frutos, sobre todo a la hora de jugar fuera de casa. Ahora, la obligación es de San Martín si quiere ratificar su idea de ascenso sin escalas. El cambio táctico llega después que el propio Garnero reconoció que al equipo le faltaba volumen de juego y llegada con más gente al área rival.
¿Puede ser un arma de doble filo? Seguramente que sí y de esta manera lo entienden en el plantel pues una caída el domingo y una victoria de Belgrano hoy pondría al Verdinegro cuarto y de cara a una hipotética Promoción contra River, algo que ya anticipó Garnero preferiría evitar. ‘Por más que esté mal, River es River y si me dan a elegir, no tomaría esa opción‘, contó el DT hace un par de semanas dejando en claro su respeto por el Millo.