El seleccionado argentino, este de Lionel Messi, Angel Di María, Sergio Agüero y compañía, que viene de sumar frustraciones en los dos pasados campeonatos del mundo y la Copa América de 2011 en la que además fue local, buscará en la Final de hoy a las 17 (TV Pública) ante Chile en una conmocionada ciudad de Santiago, reivindicarse de tantos reveses y por fin levantar este trofeo que se le viene negando desde hace 22 años.
Es que fue justamente una Copa América, la de Ecuador 1993, cuando un técnico absolutamente vinculado a Gerardo Martino desde su ideología futbolística como Alfio Basile, condujo al último equipo nacional hacia un título importante.
Desde entonces pasaron dos generaciones de futbolistas argentinos que mordieron el polvo de la derrota en los mundiales de Estados Unidos, Francia, Corea-Japón, Alemania, Sudáfrica y Brasil, más todas las Copa América que hubo en el medio.
Algunos, como Lionel Messi, Javier Mascherano y Carlos Tevez lo vienen padeciendo desde hace rato, mientras que otros se sumaron en los últimos tiempos para intentar torcer ese rumbo que terminó barnizando a todos ellos y a sus antecesores, como por ejemplo Juan Sebastián Verón, Hernán Crespo y varios más, del mote de ‘fracasados‘, algo que en las últimas horas convalidó el arquero Mariano Andújar en diálogo con Télam.
‘No queremos que esta generación se acabe sin levantar una Copa‘, dijo el capitán Lionel Messi apenas llegó a Chile, replicando a su compañero de Barcelona Javier Mascherano, que previamente había enarbolado esa bandera de ‘ahora o nunca‘.
Es que la herida del Mundial de Brasil, pese al subcampeonato, recién empezará a cicatrizar en parte si alrededor de las 19 de mañana Argentina logra enmudecer a un estadio Nacional que estará colmado de chilenos que también impulsan a su selección por las mismas razones que esgrimen los argentinos, aunque con una sutil diferencia: 14 Copa América contra ninguna.
Dentro de esos parámetros, lo futbolístico será lo que desequilibre y Argentina lleva ventaja por la categoría de sus individualidades, que en el mano a mano superan a las de Chile, más allá de que las propuestas también manifiestan diferencias pese a que ambos entrenadores provienen de la escuela ‘bielsista‘.
Prácticamente sin atisbos de duda después del buen entrenamiento que desarrolló el zaguero Ezequiel Garay a la par de sus compañeros, ratificando lo observado en la víspera respecto de su retorno a la titularidad en lugar de Martín Demichelis con referencia al pasado partido con Paraguay, al que faltó por un cuadro de gastroenterocolitis, Martino confeccionará sus ‘once de memoria‘ para esta final en la que él también se juega mucho.
Por el lado de Chile, el también santafesino Jorge Sampaoli no va a renegar de lo hecho hasta el presente en el torneo, aún con el temible antecedente de los seis goles argentinos sobre Paraguay, bien que prestándole igualmente alguna atención especial a su última línea, ‘porque una equivocación en esa zona seguramente Argentina la hará pagar cara‘.

