Maestro de maestros. Angel Cabrera se hizo grande en el Masters de Augusta 2009 y se quedó con el mítica chaqueta verde en el torneo de golf más importante del mundo, embolsando US$ 1,3 millones. El cordobés ganó la 73º edición en Augusta y entró en la historia del golf argentino al ser el único jugador argentino que consiguió dos torneos Major, ya que en 2007 se había quedado con el abierto de Estados Unidos. Con 39 años, Cabrera consiguió lo que no pudo el gran Roberto De Vicenzo en 1968, cuando punteó hasta el final pero por un error en la anotación de su tarjeta no pudo jugar el desempate por el trofeo. Tras las cuatro vueltas, el oriundo de Villa Allende contabilizó 276 impactos, 12 bajo el par de la cancha, y se impuso en el desempate por un impacto a Perry.
En natación, el Mundial desarrollado en Roma tuvo de todo. Los 43 récords de mundo batidos sorprendieron y avivaron la polémica por los trajes de poliuretano, que desde el 1 de enero de 2010 no se podrán usar porque favorece la flotabilidad de los nadadores. En tanto, el gran nadador estadounidense Michael Phel, que venía de una suspensión de tres meses porque lo filmaron fumando marihuana, demostró su vigencia y no sólo cosechó medallas sino que hasta bajó algunos de sus propios récords. Estados Unidos y China demostraron la hegemonía al frente del medallero, ambos con un total de 29 medallas.
En tanto, Usain Bolt destrozó los límites de la historia al parar en 9.58 segundos su marca en los 100 metros libres, durante el Campeonato Mundial de Atletismo desarrollado en Berlín (Alemania). El jamaiquino batió su marca de 9.69 del año anterior y superó a Gay (9.71 y medalla de plata) y Powell (9.84 y bronce).