Buenos Aires, 10 de marzo.- Banfield cuidó esta noche el invicto y la cima del Grupo 6 de la Copa Libertadores de América con un empate 2-2 ante Nacional en el Estadio Centenario de Montevideo.
Por la tercera fecha, todos los goles se produjeron en el primer tiempo: Gustavo Varela puso temprano en ventaja a los uruguayos, pero el colombiano James Rodrguez consiguió dos valiosos tantos consecutivos para el Taladro. Sobre el final de la etapa el 2-2 lo colocó Mario Regueiro.
Con este resultado el conjunto albiverde sigue imbatido y lidera la zona con siete puntos, ya que tena como antecedentes triunfos ante el Morelia mexicano y el Deportivo Cuenca, ante los ecuatorianos como visitante.
El punto acerca al Taladro a la clasificación para la próxima ronda ya que el conjunto uruguayo es su principal adversario y escolta, a dos unidades de distancia. Tercero está Cuenca, con 3, y cierra Morelia, con 1.
Además, el sólido equipo de Julio Falcioni será anfitrión en dos de los tres partidos que le faltan para terminar la serie, el más inmediato, el martes 16 del corriente ante Nacional.
El cotejo empezó muy complicado para los sureños, ya que, a los 5 minutos, Varela se valió de una diagonal certera desde la izquierda hacia adentro para definir de primera la pelota que recogió tras un centro cruzado que sobró a Jonathan Maidana y sorprendió a un Julio Barraza que no atinó a cerrar.
Banfield se veía superado por su rival y tenía enormes dificultades para obtener el balón, pero, a los 17, Rodrguez definió de palomita luego de un desborde sobre la izquierda que impuso con potencia y resolución Rubén Ramrez.
Es más, a los 36, el Taladro se vio favorecido por un penal mal sancionado, ya que no hubo falta contra Rodrguez, pero el mismo cafetero se ocupó de aprovechar la chance y definir desde los doce pasos abajo y a la izquierda de Rodrigo Muñoz.
Cuando pareca que la formación bonaerense empezaba a acomodarse mejor en el terreno se concreto, en el minuto 40, el 2-2, porque Regueiro recibió y capitalizó un rebote en el travesaño, luego de un cabezazo de Sebastián Coates.
En la segunda parte fue Nacional el que buscó con determinación el desnivel, mientras que Banfield optó por darle prioridad a conservar lo que ya tenía, el punto fuera de casa.
El Taladro pasó algunos sobresaltos y pudo haber perdido, aunque también mediante el camino de la réplica tuvo ocasión de multiplicar el producto de su negocio.
En definitiva el elenco uruguayo hizo méritos como para imponerse, pero a Banfield ser precavido también le resultó utilitario.