Beatriz Lund lo había pensado hace bastante y el día de su cumpleaños número 60 lo concretó. La profesora de Educación Física y nadadora por excelencia se dio el gusto de cruzar a nado el Dique Punta Negra. Fue un regalo propio de cumpleaños. En realidad un desafío personal que tuvo su final feliz. Cumplió su sueño el 4 de enero, un día que quedará imborrable en el recuerdo.

Mamá de Flor Felamini, una de las integrantes del Seleccionado Argentino femenino de hockey sobre patines que es el actual campeón del mundo, Beatriz siempre estuvo relacionada a la natación, en especial en aguas abiertas. El sueño de cruzar el Dique Punta Negra (desde la desembocadura hasta el embarcadero) estuvo desde hace tiempo en su mente. El esfuerzo no es novedad para ella porque el 21 de febrero de 2010 había cruzado el Dique de Ullum, desde Punta Tabasco hasta el complejo de la Universidad.

Luego del objetivo cumplido, Beatriz aclaró: "El año pasado, cuando nos dejaron ir a nadar al Dique Punta Negra me encantó: aguas más claras, sin greda, con un paisaje imponente. Tanto me gustó que fui a nadar durante el invierno y participé del Campeonato Argentino NAF (Nadadores de Aguas Frías) en distintas partes del país. Salí primera en mi categoría y terminé como subcampeona en la general de damas".

Sueño concretado. Beatriz Lund finaliza el desafío personal de cruzar a nado el Dique Punta Negra.

Después contó: "Mientras nadaba en el Dique, en mis momentos de soledad, me acordé del cruce que hice a nado en el Dique de Ullum. Y me pregunté: ‘¿por qué no nadar en su máxima extensión el Dique Punta Negra y hacerlo el día de mi cumpleaños? Así fue que me puse en campaña y a trabajar en ese objetivo. Le dije a mi entrenador, al Presidente de Federación Sanjuanina de Natación y a la Secretaría de Deportes. Todos apoyaron el proyecto y me dieron su aval"

Y terminó diciendo: "Así fue que hice el Cruce de Dique Punta Negra desde la desembocadura de río hasta el embarcadero, completando una distancia de entre 8 y 9 kilómetros. Me acompañó la lancha y una moto de agua, los profesores Luis y Jorge Riveros y personal de Náutica. El día estuvo maravilloso, el agua espléndida. Salvo por el oleaje que me sacaba de órbita. El tiempo aproximado fue de 3 horas 45 minutos".