El campeón argentino Kevin Benavides, reenganchado después de su abandono del miércoles en la división motos, consiguió ayer la victoria del honor en la undécima y penúltima etapa del Rally Dakar, disputada con un bucle de 501 kilómetros (346 cronometrados) en la ciudad de Bisha, Arabia Saudita.

El piloto de Red Bull KTM Factory Racing se impuso por apenas cuatro segundos sobre el líder de la clasificación general, el británico Sam Sunderland (Gas Gas KTM), que a su vez aventajó al portugués Joaquim Rodrigues (Hero Motorsport Team Rally).

Después de abandonar el décimo parcial por una rotura en el motor de la moto, hecho que lo dejó virtualmente fuera de competencia, el salteño consiguió el consuelo de obtener su primer triunfo en esta 44ta edición del rally.

El salteño, que sufrió una recarga de 15 horas en su tiempo acumulado por la deserción en la etapa anterior, se ubica en el puesto 97 de la clasificación general, por lo que sólo le resta cumplir con el orgullo de completar el rally más extremo del mundo.

Su hermano Luciano, de la escudería oficial Husqvarna, finalizó la penúltima etapa en el 26to lugar, a 27m58s de Kevin, y se mantuvo en el 13er puesto de la acumulada de la categoría.

La definición del título mañana estará centrada entre Sunderland, su escolta chileno Pablo Quintanilla (Monster Energy Honda, a 6m52s, y el austríaco Matthias Walker (Red Bull KTM, a 7m15s).

En cuatriciclos, el francés Alexandre Giroud (Yamaha Racing SMX Drag"on) saborea su coronación, al contar con una ventaja de 2h41m24s sobre el debutante argentino Francisco Moreno (Yamana). Giroud, ingresó ayer en el cuarto lugar debajo del brasileño Marcelo Medeiros (Yamaha), el polaco Kamil Wisniewski (Yamaha) y Moreno.

En autos, el qatarí Nasser Al-Attiyah (Toyota) conserva 28 minutos de ventaja sobre el segundo en la general, el francés Sébastien Loeb (Prodrive) tras la disputa de la penúltima etapa ganada por el español Carlos Sainz (Audi).

Fue la segunda victoria parcial este año para el piloto madrileño a bordo del vehículo híbrido de la escudería alemana que hizo este año su estreno en el Dakar.

En caso de asegurar su victoria, Al-Attiyah logrará el cuarto título del Dakar tras los de 2011, 2015 y 2019.

En la etapa de ayer, el mendocino Lucio Álvarez (Toyota) ingresó segundo y su comprovinciano Orlando Terranova (Prodrive), noveno, puesto que le permitió conservar el cuarto lugar en la tabla global.