San Juan, 19 de agosto.- En una vida marcada por una enfermedad, Elías Emanuel Hascher encontró la felicidad en el fútbol. En el San Martín de su querido departamento homónimo y en el Verdinegro, pero principalmente en Boca, que fue el que mayores alegrías le dio y que no encontró en otros aspectos. Por esta noche, en el Bicentenario, cumplirá su sueño de poder ver de cerca a sus ídolos por primera vez.

Emanuel tiene 28 años y cuando tenía 3 le detectaron un quiste en su cabeza. Lo operaron corriendo el riesgo de que quede ciego, sordo o mudo, pero nada de eso pasó y la intervención fue un éxito a medias, debido a que le quedaron secuelas que le provocaron la discapacidad del retraso madurativo. A veces hasta sufre convulsiones, pero dentro de todo se desenvuelve por su cuenta y de la mejor manera.

A pesar de todo, el joven le pone el pecho a la vida y practica atletismo para personas con capacidades especiales desde hace un largo tiempo. Juega al fútbol con sus amigos y es muy querido en el Barrio San Isidro Labrador del departamento San Martín, donde es un reconocido hincha de Boca. Precisamente a través del Xeneize fue que llegaron las mayores alegrías de su vida, con la obtención de los títulos y el fanatismo que despiertan sus jugadores, como Carlos Tevez en la actualidad.

Emanuel es el mayor de cuatro hermanos (David, Ezequiel y Axel) y vive con sus padres Fabián y Norma. Su pasión por Boca fue de toda la vida. Nunca pudo ir a una cancha a verlo, por eso, cuando su hermano David se enteró de que jugaba en San Juan por la Copa Argentina, no dudó un segundo y fue a comprarle el ticket. “Mi hermano (Emanuel) es la felicidad de la casa, tiene un corazón enorme, por eso le regalé la entrada. Cuando se la di se le llenaron los ojos de lágrimas porque no podía creer que iba a cumplir su sueño”, contó David a DIARIO DE CUYO.

El fanatismo de Emanuel por el Xeneize es tan grande, que a su ahijado Thiam, de 3 años (hijo de su hermano David) quiere hacerlo hincha de Boca, a pesar de que su padre es de River. Hoy, esa pasión llegará a su punto máximo cuando, por primera vez, vea de cerca al equipo del Vasco Arruabarrena justamente en su provincia.