Un golazo, al estilo Messi, convirtió Mauro Zárate. Ejecutó corto y hacía atrás un córner, pasó por detrás de su compañero y recibió el balón corriendo hacía el centro, paralelo a la línea del área grande, un par de amagues y un remate colocado abajo, al primer palo, consolidaron la victoria de Boca.

Sin sobrarle nada, ante un rival que por momentos lo puso en apuros, Boca logró superar la serie de 32vos de final de la Copa Argentina, tras derrotar por 2-0 a Estudiantes de Río Cuarto, en un cotejo que se disputó en el estadio José María Minella, de Mar del Plata.

Un regalo defensivo (Lucas Suárez quiso despejar con su cabeza y la dejó picando en el área chica) que Ramón Ábila aprovechó para anotar el 1 a 0, a los 18, y la jerarquía de Mauro Zárate para sacar rápido un tiro de esquina, buscar la descarga y meter una diagonal rumbo a la medialuna del área para luego meter un zurdazo al primer palo y establecer el 2 a 0, a los 44, fueron demasiado para el conjunto cordobés.

En el medio se produjo una jugada difícil de explicar. A los 33, Estudiantes tuvo el 1 a 1, pero malogró seis situaciones en una misma jugada, donde la ineficacia de sus futbolistas, sumada a los esfuerzos de Marcos Díaz, Lisandro López y Marcelo Weingandt por evitar el gol permitieron el milagro para los dirigidos por Gustavo Alfaro.

Aun cuando las oportunidades lo favorecieron, e incluso con un hombre más durante casi todo el segundo tiempo por la expulsión de Javier Ferreira a los 3m del complemento (doble amonestación), a Boca le costó dominar las acciones. El más destacado fue Mauro Zárate, activo durante los 90 minutos, autor del desborde que culminó con la pifia rival y el 1 a 0, y del segundo tanto xeneize, entre otras situaciones que lo tuvieron como protagonista, ya sea como generador o ejecutor.

Boca recién encontró espacios en la última media hora, con Estudiantes más abierto y jugado en busca del descuento que jamás llegó. Pero cuando Pavón y Wanchope no caían en posición adelantada, entre ambos se repartían las situaciones para desaprovecharlas, ya sea por mala puntería (el 7 le erró al arco en un tiro libre indirecto dentro del área) o por distracción (en otra, Kichán jamás levantó la cabeza para ver dónde estaba parado Ábila antes de enviar un centro atrás).

Después de un error que casi le cuesta el gol en contra cuando iban 9 minutos, Marcos Díaz se reivindicó al sacar con una volada espectacular un muy buen remate de Álvaro Cuello a los 31 de la segunda mitad.

En la próxima fase (16vos) con fecha y sede a definir, Boca enfrentará a Almagro, que dejó en el camino a Rafaela.

El próximo rival de Boca en la Copa Argentina será Almagro.


Agenda nutrida
 

Boca deberá viajar a Colombia para enfrentar el miércoles al Deportes Tolima en partido clave para cerrar su clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores de América. Luego deberá afrontar, el martes 2 de mayo, el partido por la Supercopa contra Rosario Central en Mendoza.