Boca Juniors salvó el invicto anoche al empatarle a Arsenal 2-2, en el Estadio Julio Humberto Grondona, por la penúltima fecha del torneo Apertura. El campeón se puso en ventaja por una conquista de Walter Erviti, a los 40 minutos, aunque para hacerlo se valió de una posición levemente adelantada.

Los problemas para Boca surgieron en el segundo período, porque pronto igualó Guillermo Burdisso y luego desniveló para los locales Mauro Obolo, como consecuencia de una desinteligencia entre el arquero Agustín Orion y el zaguero Rolando Schiavi.

El 2-2 definitivo lo aportó Cristian Chávez, al resolver con una impecable media vuelta para ubicar la pelota abajo y a la derecha de la valla de Cristian Campestrini. Para Boca, lo más trascendente fue salvar un registro sin derrotas que promete hacer historia mientras que para Arsenal, el punto le sirvió para acercarse al objetivo de los 25 puntos fijado por su entrenador para enderezar la temporada.

En la primera parte, el más ambicioso intentó ser Boca. De la mano de la dinámica de sus dos volantes externos (Ervitti y Rivero) más la movilidad de Chávez, el equipo de Falcioni intentó hacerse dueño del partido. Tuvo la pelota pero con muy poca profundidad hasta que recién a los 40’ Ervitti recibió en una posición dudosa y definió ante Campestrini para poner el 1-0 parcial.

En el complemento, Boca volvió dormido y Arsenal no se lo perdonó. En dos pelotas detenidas le dio vuelta el partido, primero con Burdisso y luego con Obolo. El 2-1 favorable a Arsenal despertó a Boca que buscó el empate con más ganas que fútbol.

Le costó poco tiempo porque Chávez igualó faltando más de 20 minutos para el final. Parecía que le alcanzaba para terminar ganando pero Boca se empezó a quedar sin ideas ni potencia y con eso, Arsenal hizo su negocio. Era invicto perdido pero Boca, con su chapa, sacó pecho y lo salvó.