Los Lima, mientras esperaban la llega de Bruno en el aeropuerto, contaban que ya habían dejado todo listo cuando el voleibolista llegara a casa. Su mamá Mariela había preparado para la llegada de Bruno un recibimiento muy particular. "Ya ni me acuerdo el tiempo que hace que no lo veo a Bruno, pero deben hacer como seis meses, vamos aprovecharlo al máximo el poco tiempo que le tocará estar acá pero estamos felices por todo lo logrado. Es nuestro orgullo", manifestó. La mujer aseguró que le tenía preparado carteles de bienvenida y además había armado una carpeta con todos los recortes de diario, de notas y recuerdos conseguidos por Bruno en toda su trayectoria. "Hay recuerdos desde que Bruno comenzó cuando era muy pequeño", aseguró. Su novia Mariana estaba ansiosa por reencontrarse con el voleibolista: "Lo visité cuando estaba en Buenos Aires hace tres meses, se hizo larga la espera pero valió la pena. Él está feliz pero le cuesta entender todo lo que logró", comentó Mariana. También estuvo el papá de Bruno Sergio y Mauro su hermano, a la distancia Germán, el otro hermano del medallista olímpico, seguía todo lo que pasaba por las fotos y videos que la familia Lima le enviaba. Bruno aprovechará el tiempo de disfrute en esta provincia entre asados y lasagnas, sus comidas preferidas.