Buenos Aires, 22 de marzo.- El hecho ocurrió en Río Segundo, en un partido entre Juventud Católica y Sportivo Laguna Larga de la Liga de Cordobesa de Fútbol.

En el segundo tiempo, Sportivo convirtió un gol y el árbitro consideró que el conjunto local no reanudó bien el juego desde la mitad de cancha. Los jugadores fueron a protestar, y uno de ellos recibió la segunda amarilla en el reclamo y fue expulsado. La situación se descontroló y el propio Vega y sus asistentes fueron agredidos por lo jugadores locales con golpes de puño y patadas.